El Consejo de Gobierno de la Junta de Castilla y León ha aprobado hoy la Estrategia de Comercio Minorista y Rural de Castilla y León 2024-2027.
Leticia García Sánchez, delegada Territorial de Zamora, ha explicado esta propuesta que pretende dar respuesta a los retos que afronta el pequeño comercio de proximidad, además de revitalizar un sector estratégico para la economía y la sociedad.
El plan se ha elaborado partiendo de los principales problemas que arrastra el comercio minorista de proximidad como la atomización, la escasa cultura empresarial, la débil capacidad financiera, la falta de relevo generacional y la resistencia al cambio.
Para la ejecución de este plan se contemplan 61 medidas distribuidas en 6 ejes con un presupuesto global de 122.650.381 euros durante el período de vigencia.
Protección del comercio minorista
En este apartado la Junta incluye medidas destinadas a la protección del comercio minorista. Con una inversión de 7,6 millones de euros.
Por una parte, se plantea la revisión de los instrumentos jurídicos de la ordenación del sector, y por otra, la coordinación de las actuaciones que en esta materia se llevan a cabo desde las distintas instituciones, incluyendo un fortalecimiento y ampliación de funciones de la Red de Agentes de Comercio Interior.
Formación y cultura comercial
Este eje cuenta con un presupuesto de 12,6 millones de euros, incluyendo la actualización permanente de la base de datos y la monitorización de las medidas de apoyo.
Además, se incluirán actuaciones destinadas a la toma de conciencia sobre la importancia del sector por parte de la sociedad, como actuaciones destinadas a una mayor profesionalización del capital humano que opera dentro del sector.
Modernización, digitalización e innovación del comercio minorista
El presupuesto de este eje consta de 15 millones de euros que se destinarán a aquellas medidas que impulsen la modernización y mejora de establecimientos comerciales y sus servicios de proximidad.
Se apoyará firmemente al comercio físico, pero también a la incorporación de nuevas tecnologías que permitan la digitalización de los sistemas de gestión y comercialización. Se llevarán a cabo principalmente ayudas económicas destinadas a modernizar las pymes, al igual que incentivos para proyectos de I+D+i.
Fomento de la demanda del comercio minorista de proximidad
El presupuesto de este eje se eleva a los 55,7 millones de euros, y lo conforman aquellas actuaciones que pretenden una reactivación de la demanda comercial, propiciando una mejora del entorno rural o urbano. El objetivo de este eje es promover medidas que favorezcan el consumo y permitan al comercio minorista de proximidad disponer de un contexto favorable.
Para llevar a cabo este plan se reforzarán las actuaciones de reactivación del consumo en el comercio minorista de proximidad como los bonos al consumo, las ferias comerciales, campañas de promoción o el apoyo a proyectos singulares de entornos urbanos y mercados.
Impulso del emprendimiento comercial
El presupuesto previsto para este eje es de 7,2 millones de euros, con el que se pretende expresar y desarrollar todas las actuaciones que persigan la renovación del tejido comercial que favorezcan el emprendimiento. Además, se otorgará protagonismo al relevo generacional.
Se contemplan medidas de apoyo al emprendimiento, con ayudas para la inversión y la formación, además de incentivos fiscales en la adquisición de bienes inmuebles que se destinen al sector comercial, bonificación de cuotas a la seguridad y colaboración con el tejido asociativo para facilitar el relevo generacional.
Plan específico de apoyo al comercio rural
Por último, la estrategia contempla el desarrollo de un plan específico de apoyo al comercio rural, con un presupuesto de más de 22,7 millones de euros. El objetivo es frenar la pérdida de actividad comercial en el medio rural.
Los datos han revelado el declive de la actividad comercial en el medio rural, incrementado por la evolución demográfica. Por ello, se trabaja sobre un estudio específico con el fin de profundizar en las carencias y soluciones en el comercio rural.
De forma simultánea, se contemplan actuaciones centradas en promover la comercialización y garantizar el abastecimiento, con medidas que favorecen el consumo y la venta ambulante. Medidas como el fomento del transporte a la demanda o incentivos para garantizar el relevo generacional y el emprendimiento en los pequeños municipios de la Comunidad.
Finalmente, el documento establece los criterios para llevar a cabo la ejecución y el seguimiento de las distintas medidas. De igual manera, se establece la financiación de las actuaciones previstas para garantizar su desarrollo.