La joven Rocío Crusset, hija de los periodistas Carlos Herrera y Mariló Montero, puede presumir de una carrera fulgurante en el modelaje. A sus 22 años, la sevillana ha conseguido despegar gracias a una belleza de escándalo y unas medidas fuera de toda duda... aunque quizá no tanto.
Ahora, la joven Rocío ha causado controversia en las redes sociales, siempre tan fáciles de encender. La modelo colgó una provocadora fotografía en bikini, con el hashtag #summerplease, destinada a una de sus múltiples campañas publicitarias.
Y aquí fue donde se lió todo. Sus seguidores, muchos de ellos en un tono descortés, señalaron la excesiva delgadez de Rocío, que no es la primera vez que enfrenta este tipo de críticas. Detrás de todo, la eterna polémica de la anorexia, la excesiva delgadez y el mal ejemplo que muchas modelos dan a jóvenes de su edad. La polémica estaba servida.
"Cómete un bocadillo de panceta", "me gustas más con algo más de curvas", "da mucho asquito... sólo huesecitos", "pobre chica, se ha obsesionado", "cuidado con el ejemplo"... fueron algunos de los comentarios más inmediatos, sin duda no los que Rocío intentaba provocar con la imagen.
También hay, no obstante, quien ha intentado exculpar a la modelo culpando a los cánones de belleza actuales, de los que al fin y al cabo ella no es culpable. Sea como fuere, lo cierto es que Rocío Crusset causa reacciones extremas.