La princesa Leonor ha protagonizado este viernes una divertida anécdota junto a su padre, Felipe VI, al finalizar su discurso en los Premios Princesa de Asturias celebrados en el Teatro Campoamor de Oviedo. Leonor se dirigió a su asiento, situado a la derecha del Rey, y con una gran sonrisa comenzó a aplaudir junto al resto de la sala.
Mientras agradecía el aplauso, el Rey le hizo un comentario para que parara, ya que el aplauso del teatro estaba dirigido a ella misma por las palabras que acaba de pronunciar. La heredera no se había dado cuenta y enseguida separó las manos con un simpático gesto que hizo reír a su padre.
Leonor, que el próximo lunes cumplirá 17 años, pronunció su cuarto discurso en la ceremonia de entrega de los galardones que llevan su nombre. Con una imagen mucho más madura y serena, la heredera mostró su preocupación con los tiempos que corren, pero animó a los jóvenes a "mantener el entusiasmo", a esforzarse de manera constante y a "aprender de los que saben".
Junto a los Reyes y la infanta Sofía, la Princesa reiteró su preocupación por el futuro de las nuevas generaciones ante la incertidumbre del actual contexto. "Los jóvenes somos conscientes de que la situación actual no es fácil, de que el mundo ha cambiado y sigue cambiando y de que la mejor manera de progresar pasa por mantener el entusiasmo, por conocer, equiparnos con responsabilidad y capacidad de esfuerzo, aprender de los que saben, de quienes hacen lo suyo de manera impecable, a menudo en silencio".
En sus palabras de aliento, consideró necesario "escuchar, admirar y reconocer" la excelencia de quienes han sido distinguidos por la fundación de la que es presidenta de honor. "Demuestran que el trabajo excelente, el esfuerzo constante y el sentido de la responsabilidad tienen grandes resultados (…) Nuestros premiados nos hacen sentir que las cosas siempre pueden cambiar para bien", resaltó. En su discurso, el más largo pronunciado hasta ahora, Leonor también ensalzó el legado de cada uno de los galardonados.