
Tamara Falcó cumplió 41 años el pasado 20 de noviembre, y para celebrarlo y de paso olvidar los sinsabores recientes de su ruptura, ha optado por llevarse a parte de su familia de viaje a un país exótico.
La marquesa de Griñón ha querido pasar unos días de relajación fuera de Madrid y otros compromisos laborales viajando a las islas Maldivas junto a su madre, Isabel Preysler, y su hermana Ana Boyer.
Como alojamiento, desvela Europa Press, escogió el Sonaba Resort donde ya estuvo con su madre el año pasado. Se trata de un lujoso hotel de 4.000 euros la noche que, naturalmente, ofrece todos los servicios imaginables, y cuya cocina se inspira en la cocina autóctona del país.
Tamara no se ha estado precisamente quieta tras su ruptura con Íñigo Onieva, sucedida tras desvelarse una sucesión de engaños del joven empresario nada más pedir matrimonio a Tamara.
Recientemente peregrinó a Lourdes para rezar a la Virgen como demostración de su fe. "No os riáis, no es justo, iba con el uniforme de Hospitalidad... Y es muy práctico, porque es lo mismo que cuando estás en el cole que no piensas lo que te tienes que poner. Lo hizo un diseñador famoso, desde que empezó ha sido ese uniforme el que se lleva. La gente se lo presta pero yo, que soy una tiquismiquis, me lo he comprado. Volveré", dijo Tamara entonces.
La marquesa también ha estado en Emiratos Árabes, donde pudo disfrutar de la compañía de su hermano Enrique Iglesias, con quien tiene un vínculo muy fuerte acudiendo a un concierto. Tamara tendrá que estar de vuelta esta semana para atender sus compromisos profesionales en la finca El Rincón, que pretende convertir en restaurante, y por supuesto en el programa El Hormiguero de Pablo Motos.


