
Jessica Bueno se ha convertido en una de las grandes revelaciones de la octava edición de Gran Hermano VIP. Aunque durante sus primeros días la modelo mantuvo un perfil bajo, no ha tardado en integrarse con sus compañeros y ya se perfila como una de las posibles ganadoras. Hasta ahora, Jessica se había mostrado cauta a la hora de hablar de su vida privada, sin embargo, en las últimas horas se ha abierto hablando por primera vez sobre su hijo Fran, de diez años, nacido de su relación con Kiko Rivera, así como de su reciente ruptura con el futbolista Jota Peleteiro.
Jessica aseguró que aunque su hijo es físicamente muy parecido a ella, ha heredado la simpatía y el carisma de su padre: "Se parece mucho a su padre, siempre quiere hacer reír a los demás. Lo ves y dices: ‘Es igual que su padre". Eso sí, tiene el mismo color de ojos queyo", aseguró, confesando que aunque tras su ruptura con Kiko vivieron "algunos momentos de tensión", actualmente mantienen una buen sintonía para "velar por el bienestar y la felicidad" de su hijo. Un equipo bien coordinado del que también forma parte Irene Rosales: "Siempre he querido que tenga relación con su padre. Además Irene es como si fuese otra madre para mi hijo, lo quiere mucho", dijo, destacando el papel de la mujer de su expareja.

Respecto a la abuela de su hijo, Isabel Pantoja, desveló que aunque lleva años sin verla, siempre ha sido muy atenta con Fran: "Cuando era más pequeño se iba allí con ellos porque adora a su abuela Isa y a Agustín .Una relación estupenda de abuela y nieto".
De la misma manera, la influencer explicó que su hijo siempre ha querido mucho a Jota Peleteiro, de quien Jessica se divorció el pasado mes de diciembre tras nueve años de matrimonio: "Mi hijo es como si tuviese dos padres, él sabe quién es su padre, pero sentimentalmente tiene otro padre también porque se ha criado con mi exmarido". En la misma conversación, Jessica también profundizó en esta ruptura, asegurando que le causó "un gran dolor" del que le ha costado recuperarse.
Ahora Jessica ha vuelto a "sentir mariposas" gracias a Pablo Marqués, quien en la últimas horas se desplazó a los alrededores de la casa de Guadalix de la Sierra, en Madrid, con un megáfono para mandar un mensaje de ánimo a su pareja. Un detalle que le ha servido a Jessica para recargar fuerzas y afrontar la recta final del reality.
