
Poca información de lo acontecido en El Pardo, una ceremonia familiar e íntima donde, esta vez sí, la Familia Real al completo se ha reencontrado en el mismo patio donde Felipe pidió la mano a Letizia. Leonor de Borbón pudo reencontrarse con su abuelo don Juan Carlos -a quien no ve desde agosto de 2020, cuando el emérito se fue a Abu Dhabi- así como la reina Sofía y Jesús y Paloma Rocasolano, padres de su madre, la reina Letizia.
Unas horas después de los fastos, a partir de las siete y media de la tarde, empezaron a llegar coches de la comitiva con miembros de la Familia Real dispuestos a celebrar la mayoría de edad de la princesa Leonor. A las 20 horas el Lexus de Felipe VI, conducido por él mismo, llegó con la Reina y sus hijas en el asiento trasero para iniciar la reunión familiar.
Se trata de un emplazamiento de Patrimonio Nacional donde Felipe VI organiza actos oficiales y que también es residencia de los mandatarios extranjeros que visitan España. También un lugar de valor sentimental para él y Letizia, pues ahí tuvo lugar su pedida de mano.
En ningún momento Casa Real no se ha manifestado al respecto de proveer algún tipo de información, aunque sea gráfica, del evento, para reforzar así su naturaleza privada. En principio no se esperaba, por tanto, ninguna comunicación al respecto al margen del gran despliegue mediático de la jura de la Constitución por la mañana.
La fiesta de 18 cumpleaños de la futura Reina de España fue, por tanto, el primer encuentro de toda la familia Borbón desde hace cinco años. La última vez en que se vio al completo a la familia Borbón fue en el Palacio de la Zarzuela el 2 de noviembre de 2018, en el 80 cumpleaños de la reina Sofía, un encuentro también privado del que la Casa Real facilitó una fotografía de grupo.
El Palacio de El Pardo fue el escenario del festejo que reunió a dos familias, la del rey Felipe y también la de la reina Letizia, los Ortiz Rocasolano.
Las dudas sobre Juan Carlos
Hubo, eso sí, un segundo protagonista del evento, el rey Juan Carlos, que llegó a El Pardo en un Audi de alta gama a las 20 horas. El emérito no estuvo ni en el acto del juramento en el Congreso, ni tampoco en el posterior acto del Palacio Real, donde se impuso a la princesa el Collar de la Orden de Carlos III y tuvo lugar un almuerzo con las principales autoridades del Estado. Algo que, según diversas fuentes, ha enfadado al rey emérito tanto como la negativa a permitirle pasar la noche en dependencias reales después de la fiesta de cumpleaños.
El hecho de que no se le permita alojarse en la Zarzuela, su residencia durante más de cuarenta años, ha llevado a don Juan Carlos a acortar esta nueva estancia en España, donde llegó a las 15.00 horas desde Abu Dhabi y adonde regresará a la conclusión del festejo (aunque hay quien menciona que el rey emérito pasará la noche en Londres).
Antes del festejo, Juan Carlos I mostró su deseo de tener una conversación con Felipe VI, aunque la Casa del Rey no ha confirmado nada.
El emérito y su hijo ya mantuvieron una charla en la Zarzuela en mayo de 2022, en su primera visita a España tras su marcha, en la que don Felipe le trasladó su malestar por la gran expectación mediática que había rodeado su estancia previa en Sangenjo (Pontevedra) y los comentarios que hizo a la prensa de que no tenía que dar las explicaciones requeridas por el Gobierno sobre su comportamiento en los últimos años.
Además de los reyes, la princesa y su hermana, Sofía, y los eméritos, al cumpleaños se invitó a las infantas Elena y Cristina y sus hijos. No estuvo, como es sobradamente conocido, su prima Victoria Federica, de fiesta con amigos en Perú.
También la infanta Margarita, hermana menor del rey Juan Carlos, y su esposo, Carlos Zurita, sus hijos y los de la otra hermana del emérito, Pilar de Borbón, fallecida en enero de 2020.
Por la parte de la reina, su madre, Paloma Rocasolano; su padre, Jesús Ortiz, y su pareja, Ana Togores, y su hermana, Telma, que recientemente cumplió 50 años, entre otros.


