El próximo 20 de noviembre se cumplirán seis meses desde que Antonio Tejado salió de prisión en libertad provisional tres meses después de su detención por su presunta implicación en el robo a la casa de su tía María del Monte.
Desde entonces, hemos visto al ex de Chayo Mohedano todos los días 7 y 21 de cada mes, cumpliendo con las medidas cautelares impuestas por el juez de firmar cada 15 días en los Juzgados. Su actitud no ha variado en absoluto, y aunque se han publicado numerosas informaciones sobre él, guarda silencio absoluto ante las cámaras.
Aparentemente impasible a las preguntas de la prensa, Antonio no confirma si es cierto que tiene problemas de salud mental y sufre diferentes patologías por las que está acudiendo a terapia desde que salió de la cárcel. Tampoco si estaría valorando abandonar Sevilla para intentar comenzar de cero lejos de su ciudad natal, de su familia, y también de su tía, con la que no tiene ninguna relación desde su detención.
Pero sí resulta especialmente llamativo el cambio físico que ha experimentado desde que el pasado 20 de mayo obtuvo la libertad provisional, ya que ha aumentado considerablemente de peso si comparamos las imágenes de hace seis meses y las de ahora.
Aunque su silencio no se ha roto en ningún momento, se especula que su nuevo aspecto podría estar provocado por el complicado momento anímico, con episodios de ansiedad y de vómitos que sufriría cuando tiene que ir a firmar a los Juzgados. Una patología que sufriría desde que salió de prisión hace seis meses.