
El portavoz de Esquerra Republicana en el Congreso, Gabriel Rufián, ha reaparecido en el programa La Revuelta, de Televisión Española, pocos días después de que se difundieran unas imágenes en las que aparecía bailando bachata de lo más cómplice con Ester Expósito en un after de Madrid a altas horas de la madrugada. Durante su conversación con el presentador David Broncano, el político catalán aclaró la relación que tiene con la actriz y restó importancia al episodio.
Rufián acudió por primera vez al formato nocturno de TVE tras haberse ofrecido públicamente a participar, al comprobar en redes sociales el interés de la audiencia por verle en el programa. En su visita, y fiel a su tono irónico, llevó varios regalos a Broncano: unos pantalones de chándal con corchetes laterales —los mismos que generaron comentarios cuando los usó en un pleno del Congreso— y varios discos de música en catalán, con el propósito de promocionar a grupos catalanes.
Durante la entrevista, el dirigente republicano abordó distintos temas de actualidad política, como la situación de la vivienda o la presencia de invitados "de derechas" que a su juicio deberían acudir al programa. Ya al final de la noche Broncano aludió, de forma indirecta, a las imágenes difundidas en redes sociales en las que el político aparecía bailando con Expósito. "¿Cómo llevas que a veces no solo estés de actualidad por la política sino también por el corazón?", preguntó el presentador.
"Grandísima actriz, maravillosa y simpatiquísima"
Rufián respondió entre risas y explicó cómo fue en realidad su "noche de bachata" con Ester Expósito. "Fue sin más, el tema fue que yo iba con unos amigos, con un amigo que se casa, y coincidimos con otro grupo de amigos en el que estaba una grandísima actriz, maravillosa y simpatiquísima. Nos conocimos, hablamos y le comenté lo valiente que era en cuanto a su significación con Gaza y otras causas políticas. Me parece que se la juega un poco" ha explicado, aclarando con naturalidad que la protagonista de 'Élite' "bailó con todo el mundo porque es simpatiquísima y a mí me tocó durante un minuto, y nos grabaron".
Subrayó que se trató de una coincidencia casual y que no existe una relación más allá de ese momento. Con su habitual tono desenfadado, Rufián reconoció que el vídeo "no fue de buen grado", aunque añadió entre risas que "peor que bailar es robar", restando así trascendencia al asunto.

