Las galletas son una gran merienda o desayuno de muchas familias españolas, pero qué mejor que hornear las de uno mismo para saber realmente los ingredientes que llevan ¿no? Además, hay tantas variedades que es imposible que uno se canse de cocinarlas.
Por ello, desde Libertad Digital os traemos una receta de galletas de almendra que seguramente a más de uno recuerden a la infancia. Estas son el postre ideal con un café y, además, si tienes visita a casa quedarás genial porque son facilísimas de hacer y súper ricas. Te invitamos a que cojas papel y bolígrafo y tomes nota para disfrutar de ellas.
Ingredientes (para ocho galletas):
- 43gr de piña
- 110gr de harina de trigo espelta integral
- ralladura de naranja
- una onza de chocolate 85%
- 59gr de almendra molida
- 26gr de aceite de coco
- una cucharadita de coco rallado deshidratado
- una cucharadita de nuez moscada
- cucharadita y media de canela en polvo
- una cucharadita de levadura química en polvo
- cucharadita y media de aroma de azahar
- cucharadita y media de miel
- una cucharadita de jengibre en polvo
- una cucharada de almendras en cubitos
- cucharadita y media de aroma de vainilla
- una pizca de sal
Preparación:
Lo primero y más importante es que la piña no es entera sino zumo más rodajas trituradas Esto lo conseguimos de la siguiente manera: lo primero es triturar las rodajas de piña en su jugo y colarlo bien. Después vertemos el líquido en una olla calentada a fuego medio y ponemos una cucharada y media de miel, una cucharada de coco rallado, otra de ralladura de naranja, media de extracto de vainilla y otra media de aroma de azahar y removemos.
A continuación lo dejamos hervir unos minutos sin dejar de remover hasta que tengamos la textura que deseamos. Lo retiramos del fuego y lo dejamos enfriar hasta que lo vayamos a utilizar.
Ahora sí, vamos con las galletas en sí. Lo primero es mezclar todos los ingredientes sólidos por un lado y, en otro bol, todos los líquidos. Una vez tenemos las dos mezclas hechas las unimos en un solo bol y amasamos hasta conseguir una pasta moldeable.
Cuando hemos conseguido esto vamos cogiendo pedazos de la masa y haciendo bolitas, hay que intentar que queden más o menos todas del mismo tamaño sino después nuestras galletas serán muy irregulares. Aquí también ponemos a precalentar el horno a 170ºC mientras aplastamos las galletas. Cuando tenemos el horno listo y las galletas formadas lo metemos durante 20 minutos.
Por último, antes de que se enfríen hay que decorarlas. En mi caso he utilizado tanto la almendra en cubos como la onza de chocolate, unas galletas con chocolate y otras con almendra. Sin embargo, esto es opcional y la decoración es totalmente al gusto. Luego solamente queda que se enfríen del todo y a disfrutar.