El salmorejo tiene la consistencia final de un puré o de una salsa espesa y se suele acompañar con otros ingredientes al gusto, aunque yo me quedo con un poco de huevo duro y un buen jamón ibérico. Lo más importante es utilizar un excelente aceite de oliva virgen extra y que los tomates lo acompañen.
Es una receta contundente, económica y muy nutritiva, que puede servir como primer plato o como único dependiendo del acompañamiento. Además es perfecta para la época de calor porque al comerse fría es ideal para refrescarnos y la manera perfecta de tomar verduras.
El salmorejo nos aporta agua, vitaminas y sales minerales. El pan, le aporta algo de contenido en hidratos de carbono, y acompañado de jamón y huevo duro picados se convierte en un plato muy completo.
Por todo ello, en Libertad Digital nos ponemos manos a la obra y preparamos un rico y sencillo salmorejo que salvará muchos días de verano. No olvides coger papel y bolígrafo para no perderte detalle de la receta.
Ingredientes (para cuatro raciones):
- 100gr de tomates
- 100gr de pan integral de trigo
- 75gr de aceite de oliva
- 50gr de vinagre de vino blanco
- una pizca de sal
- un diente de ajo
Preparación:
Lo primero que debemos hacer es cortar los tomates y triturarlos junto con el ajo, la miga de pan y el vinagre.
Una vez tenemos una masa homogénea añadimos el aceite mientras removemos y volvemos a triturar hasta conseguir la textura deseada. Luego simplemente añadimos un huevo duro por encima a la hora de servir y listo.
Si lo queremos guardar para más tarde en la nevera que, además con el calor, cuanto más fresquito más delicioso y mejor entra. Simplemente queda disfrutar.