
La prestigiosa revista Wine Enthusiast ha reconocido al cava Dioro Baco Brut Rosado Pinot Noir, elaborado por la Familia Escudero, como el mejor cava rosado del mundo, otorgándole una clasificación de 94 puntos. Un logro que refleja el resultado de un largo camino marcado por la ilusión y el cariño que ha llevado a este cava de origen riojano a alcanzar un lugar destacado en la escena global y conquistando los paladares más exquisitos del mundo.
La uva procede de los viñedos propiedad de Bodegas Escudero en el término municipal riojano de Grávalos, al sur de Monte Yerga en las estribaciones de la Cordillera Ibérica, a una altitud de 800 metros sobre el nivel del mar. Una zona muy alta en la que se consiguen vinos frescos con poca graduación, con aromas muy finos y elegantes. La variedad Pinot Noir originaria de Borgoña es una de las tres variedades más importantes de Champagne.
En Dioro Baco se aprecia un color rosado frambuesa con reflejos acerados y una fina burbuja que forma un pequeño rosario de evolución lenta. En nariz, su aroma es afrutado de fresa y frambuesa junto a florales como pétalos de rosa. En boca resulta sabroso y potente, con una ligera acidez y una burbuja muy bien integrada, persistente y elegante.
No es de extrañar que los catadores queden cautivados por la delicadeza de esos aromas, la elegancia de sus burbujas y su frescura en boca. Lo mismo pasa con muchos de los lectores de Libertad Digital que ya han probado los magníficos cavas de la Familia Escudero, que llevan años colaborando y participando en la cesta de Navidad de LD como la de esta año de las que ya quedan muy pocas unidades.
La historia de Dioro Baco
La historia de Dioro Baco comienza con un sueño, la visión de Benito Escudero de elevar la elaboración tradicional de los cavas a un nivel superior. Durante la década de 1950, tras un enriquecedor viaje a la región de Champagne en Francia, Benito llegó a Grávalos con el firme propósito de crear un vino espumoso que fusionara la elegancia francesa con el carácter distintivo de La Rioja.
En una pequeña cueva, enclavada en la colina que abraza el pintoresco pueblo riojano de Grávalos, comenzó a elaborar vinos espumosos siguiendo las técnicas francesas y experimentando con distintas mezclas que combinaban variedades autóctonas como la Viura y la Garnacha con variedades francesas como el Chardonnay y el Pinot Noir, hasta que finalmente logró su objetivo: un cava delicado y elegante que deleita el paladar y eleva el espíritu.
Esta emocionante aventura es transmitida a través de cinco generaciones, un legado familiar que les han convertido en una referencia en el mundo de la enología, donde la calidad y la innovación son nuestros pilares. Dioro Baco se ha convertido en la elección perfecta para disfrutar, celebrar y compartir los momentos más felices con tus seres queridos.

