Siempre se espera que un tatuaje dure para siempre, al menos, esa suele ser la idea cuando te realizas uno, pero lo cierto es que tienden a desvanecerse. Los colores desaparecen y las líneas finas y las letras se vuelven borrosas y menos vibrantes. Sobre todo si no se cuida bien desde el principio, tiene una gran exposición al sol o ha pasado mucho tiempo desde que se realizó.
Como puede suponerse, la velocidad a la que se desvanece un tatuaje depende de varios factores, incluyendo la calidad de la tinta, salud de la piel, la fricción y la exposición al sol, pero, afortunadamente, se puede retardar el proceso de decoloración y hacer que su estancia tatuajes frescos por más tiempo.
Para que el tatuaje parezca casi recién hecho durante mucho más tiempo hay unos simples consejos que se pueden seguir, independientemente de la época del año en la que uno se tatúe. Evidentemente, si te realizas el tatuaje en verano deberás tener mucho más cuidado con el sol que durante el resto del año.
- Mantenlo envuelto al principio
A menudo, cuando te haces un tatuaje, el artista lo envuelve en una película adhesiva para protegerlo durante los primeros días para evitar la entrada de bacterias y evitar el roce. En ocasiones, y cada vez más, es más normal que el tatuador te diga que te quites el film al llegar a casa, sin embargo, para evitar roces innecesarios es mejor dejarlo al menos el primer día.
Evitar la exposición directa al sol durante el primer mes después de hacerse el tatuaje y asegurarse de aplicar protector solar con al menos SPF 30 en su tatuaje cada vez que esté expuesto al sol para evitar la decoloración.
- Minimiza la exposición al sol
La protección contra el sol reduce el riesgo de cáncer de piel y evita que el tatuaje se desvanezca rápidamente. La exposición al sol prolongada e intensa, como puede ser en verano, acelera el proceso de pérdida de color de cualquier tatuaje. Por ello, para mantener su tatuaje como nuevo lo mejor es usar protector solar de al menos SPF 30 o más, si se puede cubrir el tatuaje cuando hace sol, eso también ayuda.
- Hidratar con frecuencia
Cuanto más hidratada esté la piel, más vibrantes y saludables se verán los tatuajes. Uno de los hidratantes más eficaces es la manteca de cacao ya que es altamente eficaz para prevenir el envejecimiento de los tatuajes al ser rica en ácidos grasos saludables.
- Aplicar un cuidado especial a los tatuajes con más exposición
Algunas partes del cuerpo se desgastan más que otras, y dado que la exposición excesiva puede afectar la longevidad de un tatuaje, estas áreas deben recibir atención adicional.
Los hombros como ejemplo y recomienda aplicar protector solar adicional ya que sufren mucha exposición al sol, también el roce de camisetas y mochilas hace que se desgaste antes el tatuaje en esa zona del cuerpo. Los tatuajes de dedos son otra área donde los tatuajes a menudo se desvanecen más rápido de lo habitual. En este caso, una crema especial para tatuajes puede ser una buena inversión.
- Lograr un equilibrio de hidratación
Asegúrese de escuchar a su artista del tatuaje y de aplicar productos calmantes y cremas que reducirán la picazón, las cicatrices y el daño tisular. Hidratar su piel ayuda a acelerar el proceso de curación.
¿Qué no debes hacer después de realizarse un tatuaje?
- Beber alcohol en exceso
Lo aconsejable es no beber mucho antes o después de un tatuaje. Esto se debe a que el alcohol diluye la sangre, lo que podría hacer que sangre más de lo normal durante el proceso de tatuaje y curación. Además, durante el proceso de tatuar puede inflamarse más rápido la zona y puede tener que pararse antes de tiempo la sesión, por lo que podría ser que no se terminara la pieza.
- Ir a nadar
Esto es porque el agua, tanto de la piscina como del mar, puede causar irritación e infecciones. Por ello es aconsejable no nadar durante, al menos, dos o cuatro semanas después de la realización del tatuaje.
- Tomar el sol
Durante el primer mes después de su tatuaje, lo más adecuado es evitar la exposición al sol para evitar la decoloración y la distorsión del color.
- Rascarse
Los tatuajes tienden a picar mientras se curan, pero resisten la necesidad de rascarse, lo que puede irritar o rasgar la piel.
- Hacer revisiones constantes
La piel puede tener una mala reacción a la tinta y puede ocurrir al hacerte el tatuaje o años después, por ello es que debes revisar la zona con periodicidad en busca de cambios (enrojecimiento, lunares y otros signos "raros").