Como cada verano, hay ciertas tradiciones que acompañan ya sean buenas o malas. No hay que olvidar que los mosquitos y las avispas son los grandes compañeros de comidas al aire libre y las noches de verano. Pero, las buenas son las vacaciones, el chiringuito, los amigos, las altas temperaturas, los baños, las actividades acuáticas, las jornadas de playa...etc. Pero en la playa no todo es bueno y bonito ya que en ocasiones, también acompañan visitantes algo incómodos: las medusas.
De hecho, todos los años, las picaduras de las medusas constituyen uno de los problemas más comunes entre los bañistas durante el verano, cuando aumenta la afluencia de los visitantes en sus aguas. Pero estas molestas picaduras pueden desaparecer y aliviarse sin ningún tipo de tratamiento específico, pero con ayuda de remedios naturales pueden mejorar en el caso de picaduras más graves o contribuir a calmar la molestia, el escozor o las marcas que pudieran quedar.
¿Qué son las medusas? Las medusas son unos animales invertebrados, pertenecientes al género de los cnidarios, palabra griega que significa ortiga. Esto se debe a que una de las principales características de estos animales es la posesión de los conocidos como cnidoblastos, unas células urticantes distribuidas por toda su superficie, que tienen la misión de defensa y captura de sus presas. De hecho, su picadura provoca dolor fuerte, intenso y una inmediata sensación de quemadura y escozor. Por suerte, en las costas españolas, las tipologías de medusas no son letales, y no hay especies como la medusa asesina, la carabela portuguesa, o la más peligrosa, la avispa de mar, que frecuenta las costas australianas, y cuyo veneno puede ser mortal para un humano.
Por tanto, si se veranea en España y se es picado por una medusa hay que saber que la sensación es muy molesta, con picor y la aparición de rojez, hinchazón, vesículas y pústulas y aunque normalmente no implican gravedad, en algunos casos pueden aparecer síntomas parecidos a una reacción alérgica grave.
¿Cómo se pueden evitar?
Si se observa que la presencia de muchas medusas en la costa:
- Las autoridades locales deberían identificar, si es posible, la especie, así como avisar y advertir del riesgo a los bañistas que no estén muy familiarizados con las medusas. En algunas playas, se colocan banderas advirtiendo de su presencia en el agua.
- Deberán sacarse, con mucho cuidado, el máximo posible de medusas del agua y recoger las que estén en la arena, para evitar que entren en contacto con los bañistas o paseantes.
- Se deben tomar precauciones incluso si las medusas están lejos de la costa. La acción de las olas puede arrastrar tentáculos que siguen siendo activos.
- Hay que evitar pasear por zonas de la playa o de rompeolas donde se puedan salpicar; el agua arrastra fragmentos de medusa con células todavía activas. Las células precisan de un periodo de 24 horas de sol para desactivarse.
- Hay que prestar especial atención a los niños, personas con historial de alergias, con problemas cardíacos o que hayan sido picadas con anterioridad, ya que suelen ser mucho más sensibles a las picaduras de medusa.
¿Cómo es el veneno de las medusas?
La composición del veneno de las picaduras de medusas es aún bastante desconocida y varía mucho dependiendo de la especie de la que se trate. Su mayor o menor efecto en los afectados dependerá de diversos factores como:
- La densidad de las células urticantes
- La zona afectada por la picadura, el motivo es que la región más sensible es el tronco ya que desde ahí el veneno puede penetrar más rápido en el torrente sanguíneo
- La cantidad de veneno inyectado
- La edad y peso de la persona que recibe la picadura
- La exposición anterior al veneno de medusa, lo que podría acrecentar sus efectos
¿Qué síntomas producen las picaduras de medusa?
Las picaduras de medusa se caracterizan por provocar dolor, picor intenso, enrojecimiento e inflamación de la zona afectada. También se producen eritema y habones urticariales, que en algunos casos más graves pueden evolucionar a ulceración y necrosis. Posteriormente, también pueden aparecer síntomas similares a los producidos por una quemadura. Y en casos graves, la distribución del veneno por todo el organismo puede conducir a una sensación de opresión torácica, calambres musculares e incluso dificultad respiratoria. Además, con cierta frecuencia puede aparecer un cuadro con angustia, agitación, pérdida de apetito, conjuntivitis y en ocasiones dolor de cabeza.
No obstante, en general, los síntomas suelen ceder en pocas horas. De manera más rara y en personas especialmente sensibles a estas picaduras, como lactantes, ancianos o personas con graves enfermedades generales, la sintomatología puede ser de mayor gravedad. Si esto ocurriera se debe trasladar al afectado al hospital o al centro de salud más cercano.
¿Cómo se deben tratar?
Una vez limpia la zona, para disminuir el escozor de la picadura, se debe aplicar frío a la zona afectada durante 15 minutos aproximadamente. No obstante, hay que tener en cuenta que no se debe aplicar el hielo directamente sobre la picadura, sino cubierto con algún paño o toalla. Una vez se ha aliviado la primera impresión hay más consejos que se pueden seguir para aliviar el picor y el malestar:
- Salir del agua: si la picadura se ha producido dentro del agua lo mejor es salir rápidamente y alejarse del área donde se encuentran las medusas. Esto es, básicamente, para evitar más de una picadura.
- Lavar la zona afectada: hay que enjuagar la picadura con agua salada o agua de mar para eliminar los restos de tentáculos que puedan quedar adheridos a la piel. Es importante no usar agua dulce, ya que puede liberar más veneno.
- Es importante retirar cualquier pequeño resto de un tentáculo adherido, pero jamás hay que hacerlo directamente con los dedos, si no usando unas pinzas o unos resistentes guantes.
- Evitar rascar o frotar la picadura: es importante evitar rascarse o frotar la picadura, ya que esto puede provocar infecciones secundarias.
- Un tratamiento para la picadura de medusa es aplicar hielo, sobre todo si existe inflamación, para aliviar la picadura de medusa, pero no hay que ponerlo nunca directamente sobre la herida. Hay que envolverlo en una toalla y meterlo dentro de una bolsa de plástico para que, al derretirse, no entre en contacto el agua dulce del hielo con la picadura.
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Aplicar vinagre: el vinagre blanco puede ayudar a neutralizar el veneno de algunas especies de medusas. Es tan sencillo como mojar una gasa o un paño con vinagre y colocarlo sobre la picadura durante unos 15 minutos.
- Usar agua caliente: aplicar compresas de agua caliente, pero no demasiado caliente para evitar quemaduras, en la zona afectada durante 20 minutos. El calor puede ayudar a aliviar el picor y reducir la inflamación.
- Utilizar cremas o lociones: se puede aplicar una crema o loción con ingredientes calmantes como aloe vera, calamina o hidrocortisona para aliviar la picazón y la irritación.
- Tomar antihistamínicos: si se experimenta una reacción alérgica o una picazón intensa, se puede considerar la posibilidad de tomar un antihistamínico oral de venta libre.
- Vigilar los síntomas: si la picadura produce síntomas graves como dificultad para respirar, hinchazón excesiva, mareos o náuseas, lo ideal es buscar atención médica de inmediato.