
Aunque los niños menores de cuatro años de edad tienen más riesgo de atragantarse con alimentos y objetos pequeños, los mayores también pueden hacerlo. Hay diversos alimentos y objetos como perritos calientes, trozos de carne mal masticados, uvas, zanahorias crudas, caramelos duros, globos y piezas pequeñas de juguetes que pueden quedarse atascados en las vías respiratorias e impedir que el oxígeno llegue a los pulmones y también al resto del cuerpo.
Un atragantamiento es una de las situaciones más angustiosas que se pueden experimentar. Cuando un objeto o un alimento obstruyen completamente la vía aérea hay que actuar rápidamente. Es importante saber cómo hacerlo por si se necesita en algún momento.
¿Cuál es la situación?
Obstrucción parcial o leve: esto es cuando la persona puede hablar o toser
- Posición que debe adoptar: quien vaya a ayudar debe situarse detrás, poner una mano en la cintura y otra al nivel de la boca del estómago
- Tos dirigida: desde esa posición se han de de dirigir las toses para que sean lo más efectivas posibles
- Cuerpo inclinado: hay que mantener a la persona sujeta siempre a favor de gravedad, facilitando que salga el cuerpo extraño
Obstrucción total o grave: es cuando la persona se lleva las manos al cuello
- Cinco golpes secos: hay que colocarse detrás de la persona que se está ahogando y hay que dar cinco golpes secos entre los omoplatos con el dorso de la mano
- Colocación de las manos: hay que situarlas a la altura de la boca del estómago una mano con el dedo gordo ‘escondido’ por el resto
- Cinco compresiones: si no funcionan los golpes hay que abrazar y tirar hacia arriba para generar presión en la región diafragmática y que el aire salga con fuerza
Si la persona está embarazada o no se puede rodear su vientre con los brazos, dale presiones en el pecho:
- Colocar las manos en la base del esternón, justo por encima de la unión de las costillas inferiores
- Presionar el pecho con fuerza de manera que des una presión rápida. Esta es la misma acción que se hace en la maniobra de Heimlich.
- Repetirla hasta quitar el objeto que causa la obstrucción de las vías respiratorias.
Para despejar las vías respiratorias de una persona inconsciente:
- Baja a la persona al suelo , con la espalda apoyada en este y los brazos a los lados.
- Despejar las vías respiratorias. Si se puede ver el objeto, colocar un dedo en la boca para sacar el objeto. Nunca hay que hacerlo si no se puede ver el objeto, ya que uno se arriesga a empujar el objeto que crea la obstrucción aún más adentro de las vías respiratorias.
- Comenzar con la reanimación cardiopulmonar si la persona todavía no responde. Si las vías respiratorias aún están obstruidas, hacer compresiones cardíacas como las que se usan en la reanimación cardiopulmonar para quitar el objeto atascado. Solo haz dos respiraciones de rescate por ciclo. Revisa la boca con regularidad para ver si se detecta el objeto.
Para despejar las vías respiratorias de un bebé menor de 1 año que se atraganta:
- En posición sentada, sostener al bebé boca abajo en el antebrazo. Apoyar el tu antebrazo sobre tu muslo. Sostener el mentón y la mandíbula del bebé para brindarle apoyo a la cabeza. Hacer que la cabeza quede más abajo que el tronco
- Golpear al bebé suave pero firmemente cinco veces en la mitad de la espalda con parte inferior de la palma de tu mano. Poner los dedos hacia arriba para no golpear la parte de atrás de la cabeza del bebé. La combinación de la gravedad y los golpes en la espalda deberían expulsar el objeto que causa la obstrucción.
- Poner al bebé boca arriba sobre el antebrazo si la respiración no se reanuda. Apoyar el brazo sobre el muslo y hacer que la cabeza del bebé quede más abajo que el tronco
- Con los dedos, hacer cinco compresiones cardíacas firmes pero suaves. Hay que colocar dos dedos justo por debajo de la línea de los pezones. Presionar hacia abajo aproximadamente unos 4 cm, esto permite que el pecho se eleve completamente entre las compresiones.
Maniobra de Heimlich
Si el niño o el adulto no respira en lo absoluto, o si está pálido o tiene tos muy débil, necesita atención inmediata. En primer lugar, hay que pedir a alguien que llame al servicio de emergencias. Mientras ellos llegan, hay que realizar la maniobra de Heimlich.
Si la persona está consciente y sentado o de pie, hay que colocarse detrás de él y rodearlo con sus brazos por la cintura. Colocar el lado del puño correspondiente al pulgar en el centro del abdomen, justo debajo del extremo inferior del esternón. Luego hay que coger ese puño con la mano libre, presionar hacia adentro con compresiones rápidas y ascendentes. Repetir las compresiones hasta que el objeto sea expulsado con tos o el atragantado comience a respirar o toser.
Tracción mandibular y levantamiento de la lengua
Si la persona está inconsciente, hay que recostarlo en el suelo boca arriba e intente realizar la técnica de tracción mandibular y levantamiento de la lengua. Abrir la boca con el pulgar presionando la lengua y los otros dedos rodeando la mandíbula; como esto hace que la lengua se aleje de la parte posterior de la garganta, así se podrán despejar las vías respiratorias. Si se puede ver el objeto extraño, hay que intentar retirarlo "barriéndolo" con un dedo hacia un lado; por supuesto se debe hacer con cuidado, ya que podría empujarse el objeto aún más abajo en las vías respiratorias y provocar otra obstrucción.
Si aún no ha vuelto la respiración, inclinar suavemente la cabeza hacia atrás y levantarle la barbilla. Luego colocar la boca del que ayuda sobre la boca del atragantado, cerrar la nariz apretando con los dedos y darle dos bocanadas lentas de aire que duren un segundo y medio a dos cada una. Si la técnica del boca a boca no da resultado, volver a realizar la maniobra de Heimlich.

