El asma es una enfermedad de los bronquios causada por la inflamación y contracción de los músculos que rodean las vías respiratorias. Algunos de sus síntomas son dificultades en la respiración, tos, falta de aire, ruidos a la hora de respirar y opresión en el pecho. Estos pueden ser graves y desaparecer o aparecer con el tiempo. Además, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las muertes por asma aumentarán en los próximos 10 años si no se comienzan a tomar medidas urgentes.
En España, el asma afecta a unos 2,5 millones de personas, de las cuales 397.000 son niños, lo que representa un 5,7% de la población menor de 14 años, según un estudio en la revista de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica. De hecho, el asma es la enfermedad crónica más común en la población pediátrica española, es uno de los motivos de consulta más frecuente y una de las mayores causas de hospitalizaciones.
En los últimos años, se han publicado diversos estudios relacionando el asma con otras enfermedades. Ciertamente, se ha encontrado una conexión entre esta enfermedad en pacientes niños y el riesgo de desarrollar Alzheimer durante la vejez. Esto se manifiesta en un nuevo estudio de la Universidad de California en Davis (Estados Unidos), publicado en "JAMA Network Open", una revista médica publicada por la American Medical Association (AMA).
El estudio ha examinado la relación entre el asma infantil y las dificultades cognitivas, centrándose en la memoria episódica y la función ejecutiva. A pesar de que el asma es la enfermedad más común en los niños, no hay estudios que hayan profundizado en cómo afecta a su desarrollo cognitivo. El estudio de la Universidad de California ha investigado si los niños con asma presentan un rendimiento más bajo en tareas de memoria en comparación con los niños sin asma. Para ello, se han incluido los datos de 2.062 niños de 9 a 10 años que padecen la enfermedad.
La infancia, período de mejora en la memoria
Según Nicholas Christopher-Hayes, primer autor del estudio, "la infancia es un período de rápida mejora en la memoria y en la cognición. En los niños con asma, esta mejora puede ser más lenta". Para el estudio, se utilizaron varias pruebas cognitivas que consistieron en exámenes de memoria de secuencias de imágenes, velocidad de procesamiento de patrones y pruebas de control y atención.
Se esperaba que los niños con asma, especialmente aquellos con un inicio más temprano de la enfermedad, tuvieran un rendimiento cognitivo más bajo en tareas relacionadas con la memoria episódica. Esta memoria incluye la forma en la que recordamos experiencias y emociones, como eventos y las personas que estuvieron allí. Por ejemplo, cuando tu abuelo te regaló un peluche en tu décimo cumpleaños.
La memoria episódica y el hipocampo
El análisis reveló que los niños asmáticos obtuvieron puntuaciones mucho más bajas en la prueba de memoria episódica que los niños sin la enfermdad. También se realizó una muestra más pequeña con 473 niños a quienes se hizo un seguimiento durante dos años. Esta muestra dio como resultado que los niños que habían comenzado a tener la enfermedad en una edad más temprana o que llevaban más tiempo padeciéndola mostraban un peor desarrollo de la memoria con el tiempo.
Sin embargo, ¿por qué los niños asmáticos tienen más posibilidades de desarrollar a lo largo del tiempo problemas con la memoria? Se han realizado investigaciones con roedores que demuestran que los medicamentos para el asma tienen un impacto en el hipocampo: una estructura cerebral localizada en el lóbulo temporal del cerebro muy relacionada con los procesos de aprendizaje y memoria. Aunque no está demostrado que las investigaciones con roedores sean equivalentes a los seres humanos, podría ser una de las razones de la hipótesis del estudio.