
Las bajas temperaturas comienzan a llegar a toda España y es conveniente tener en cuenta algunos consejos para evitar un consumo excesivo de nuestra calefacción. Existen numerosas maneras de conseguir reducir el consumo. Cambiar la caldera o simplemente cambiar la decoración de nuestra casa son algunos de los consejos que la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) nos ofrece.
Bombas de calor y calderas de condensación
Las bombas de calor son la opción más barata por la que podemos optar para calentar nuestro hogar. La OCU realizó el cálculo de lo que cuesta calentar al año una vivienda de 90 metros cuadrados y la opción más económica fue la bomba de calor con sistema aire-aire.
Una bomba de calor funciona intercambiando energía con el exterior para calentar o enfriar el aire. Hay dos tipos:
- Bomba de calor aire-aire: Es el tipo de bomba que conocemos como aire acondicionado y son ideales como apoyo a otros sistemas de calefacción. Incluso si en nuestra zona de residencia no hace un frío excesivo puede ser usada como sistema principal.
- Bomba de calor aire-agua: Son bombas que se usan para calentar el agua de un circuito. Algo similar al funcionamiento de una caldera.
A pesar de su escaso coste anual, requiere una instalación exterior por lo que no siempre será posible contar con este sistema. Además, la bomba de calor aire-agua requiere una inversión inicial elevada.
La otra opción son las calderas de condensación. Según la OCU un 33% de los hogares se calientan y abastecen de agua caliente con una caldera de gas. También, indican que muchas de estas calderas son antiguas y no funcionan por condensación por lo que es conveniente valorar cambiar la caldera por una de este tipo.
Las ventajas son una reducción en el consumo y una eficiencia de hasta un 110 por ciento de rendimiento. Sin embargo, sucede como con las bombas de calor, su coste de instalación es elevado. Además, es un combustible fósil que emite dióxido de carbono.
Consejos económicos
Los consejos que acabamos de mencionar son, sin duda, los que más te harán ahorrar en el consumo de calefacción. No existe un truco sencillo que te permita ahorrarte mucho dinero. Sin embargo, no todo el mundo puede permitirse un cambio de caldera o el coste de una instalación, asi que mostraremos una serie de consejos sencillos que te permitirán ahorrar.
Una opción para ahorrar en calefacción son los burletes. Los burletes son unas tiras de plástico que se colocan en ventanas y puertas y ayudan a evitar que pase el aire. Esto permite mantener la temperatura interior.
Las persianas juegan un papel importante en la retención del calor. Según la OCU, es recomendable mantener las persianas subidas por la mañana para permitir la entrada de luz solar. Por la noche es recomendable cerrarlas para mantener dentro de la casa el calor que se ha acumulado durante el día.
En cuanto a la decoración, podemos sustituir nuestras alfombras y cortinas por unas más oscuras. Los colores más oscuros absorben mejor la radiación solar y eso se traduce en más temperatura para nuestro hogar.
Otro consejo es regular correctamente el termostato. Es preferible ir vestido con ropa más abrigada en casa que subir la temperatura del termostato. Según la OCU, "cada grado menos se traduce en un 7% menos en la factura, así que bajar esos tres grados te hará ahorrar un 20%".


