
El miedo a la muerte. En Es la Mañana de Fin de Semana han pasado por los micrófonos María Ibáñez y Jesús Jiménez para hablar de la tanatofobia, el miedo a la muerte. Recibe este nombre porque proviene de la palabras griegas 'thanatos' que quiere decir muerte y 'phobos' que significa miedo.
Jesús Jiménez ha comenzado explicando en qué consiste esta fobia: "Es miedo precisamente a la muerte propia, o sea, fallecimiento, o de seres queridos, que también se extiende a las personas que nos rodean". La muerte es un tema incómodo para muchas personas y ese temor hacia la muerte puede provocar también insomnio: "La persona tiene miedo a dormir, por miedo a no volver a despertar". En otro momentos, como los ataques de pánico, hay personas que también "piensan que se están muriendo o que se pueden estar muriendo".
El miedo real
Por su parte, María Ibáñez ha subrayado que "es cierto que cuanto mayores somos, más cercana vemos la posibilidad de morir", pero "hay muchos niños pequeñitos que tienen mucho miedo a que mueran sus padres, a quedarse solos". Asimismo, ha explicado que el miedo a la muerte no es a la muerte en sí, si no que es "miedo a lo que cada uno imagina que es morir". Por ello, las razones por las que las personas pueden desarrollar esta fobia es "por lo que imaginas o por su miedo a perder lo conocido" siendo importante distinguir la razón principal para poder resolverlo.
Los niños pequeños no entienden el concepto de 'para siempre' y pueden ver la muerte como una ausencia temporal, es alrededor de los 10 años cuando comienzan a comprender que es algo definitivo e irremediable. En esos términos, "si los niños pequeños todavía no han desarrollado ningún miedo, incluso pueden hablar de la muerte sin miedo" en caso de que ocurra en su entorno cercano.
Profundizar dentro de uno mismo
Cuando empiezan a saber que es algo irreversible, "es donde empieza el miedo" porque comienzan a imaginar "qué es eso de morir y cómo es eso". Para tratar el tema con los pequeños hay que animarles "a que comprenda qué es la muerte, pero tratando de no asustarle". En esta tarea, "los padres tienen que haber analizado qué es para ellos la muerte", ha asegurado Jesús.
La fe o algunas creencias pueden servir para trabajar psicológicamente el miedo a la muerte "pero tendríamos que distinguir entre la fe y la creencia, porque la fe es cuando una persona siente que hay algo y la creencia es un conjunto de pensamientos que llegamos a la conclusión de que existe algo o que no existe nada", ha expuesto María. Se debe aprender a descubrir la realidad y, aunque las experiencias de las personas se tienen en cuenta, hay "profundizar dentro de uno mismo, intentar conectar con la parte inconsciente". Por otro lado, para aquellas personas que tienen fe "la muerte es solo el inicio de algo mejor".