El Consejo General de Dentistas y la Fundación Dental Española (FDE), ha lanzado una campaña informativa con un decálogo de recomendaciones para mantener la salud bucodental durante el verano. Según ha informado, esta época del año puede propiciar el abandono de rutinas básicas de higiene oral, lo que aumenta el riesgo de caries, enfermedades periodontales y otros problemas que afectan a dientes y encías.
Cepillado e higiene interdental diaria
Los profesionales insisten en que, incluso en vacaciones, es fundamental cepillarse los dientes al menos dos veces al día, por la mañana y antes de acostarse, usando pasta fluorada y un cepillo de dureza media. Subrayan además la importancia de aplicar una técnica adecuada y de complementar el cepillado con higiene interdental, mediante seda o cepillos específicos, especialmente antes de dormir.
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La Fundación Dental Española ha recordado que la rutina nocturna es crucial para eliminar restos de comida y placa bacteriana entre los dientes. Asimismo, ha explicado que la falta de higiene interdental favorece el desarrollo de caries y enfermedades en las encías y, esto puede generar consecuencias negativas en el bienestar general.
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Alimentación e hidratación, claves en verano
Los dentistas advierten de que en verano suelen cambiar los hábitos alimenticios, con un mayor consumo de productos azucarados o ácidos que pueden afectar negativamente al esmalte dental. Por ello, recomiendan seguir una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, lácteos y pescado, que ayude a proteger los dientes y encías.
Asimismo, los porfesionales de la salud bucal han insistido en la impotancia de mantener una hidratación adecuada, ya que el agua estimula la producción de saliva, un elemento esencial en la defensa natural frente a la caries, el mal aliento y otras afecciones orales. En este sentido, se recomienda beber agua sola o con frutas naturales en lugar de refrescos, zumos industriales o bebidas energéticas, que contienen niveles elevados de azúcar y pueden provocar desmineralización del esmalte dental.
Tabaco, alcohol y traumatismos dentales
El decálogo también ha hehco hincapié en evitar el consumo de tabaco y alcohol, debido a sus efectos nocivos sobre la salud oral. El tabaco puede causar mal aliento, tinciones dentales y enfermedad periodontal, mientras que el alcohol puede contribuir a la erosión dental, aumentar la sensibilidad e incluso incrementar el riesgo de accidentes que afecten a la boca.
Tmabién han alertado de que en verano aumentan los traumatismos dentales por la mayor práctica de deportes y juegos al aire libre. Para prevenirlos, aconsejan el uso de protectores bucales específicos, sobre todo en actividades con riesgo de impacto.
Protección solar también para los labios
Además de cuidar los dientes, los profesionales han recordado la importancia de proteger los labios del sol. Para ello, han recomendaod usar labiales con factor de protección solar y complementarlos con gorros o sombreros. La exposición solar prolongada sin protección adecuada puede provocar lesiones en los labios, una zona especialmente sensible.
Revisión tras las vacaciones
Por último, el Consejo General de Dentistas y la Fundación Dental Española ha señalado que es vital visitar al dentista después del verano, para detectar posibles problemas derivados de cambios en los hábitos y actuar con antelación. Una revisión a tiempo, indican, puede prevenir complicaciones más graves a medio o largo plazo.