Las ayudas y subvenciones gubernamentales al cine español siempre han sido una cuestion discutida, pero las cuotas especificas a ciertos colectivos, como el de mujeres, han enredado aún más una situacion que determinados cineastas han comenzado a denunciar.
Es el caso del director y guionista David Serrano, que hace tres veranos cosechó un gran éxito de crítica y público con la comedia Voy a pasármelo bien, un relato nostálgico de la infancia de una serie de personajes influidos por la música de los míticos Hombres G.
Su segunda parte, Voy a pasármelo mejor, llega a los cines españoles este 18 de julio, repitiendo personajes y actores protagonistas. Pero no director: David Serrano es solo guionista y tuvo que ceder las riendas del film a la realizadora de cortometrajes Ana de Alva, debutante en la dirección de un largo, por razones que él mismo ha expuesto en una entrevista en la revista Fotogramas.
El guionista de El otro lado de la cama, otro éxito del cine patrio, ha confesado que no renunció a dirigir el film, y que de hecho "quería" hacerlo. "Pero ahora mismo la situación con el ICAA y la cuota de directoras complica que determinados directores podamos acceder a subvenciones. Así que vimos que era más factible que la película saliera adelante si la dirigía una mujer. Esa es la razón".
Serrano, pese a demostrar que el cine español no es un todo unívoco, matiza que hay que "apoyar la incursión de mujeres directoras y estoy totalmente de acuerdo en que se apoye a directoras noveles, pero si una cineasta ha dirigido 10 películas en 15 años, no necesita más apoyo. Se esta viviendo una situación injusta".
La primera Voy a pasármelo bien, número 1 en Amazon Prime Video en su estreno en streaming, cosechó en cines una recaudación de más de dos millones de euros en 2022, la novena película española más taquillera de ese año. No es, por tanto, una pequeña producción independiente y difícil de financiar, sino un ejemplo de cine comercial español para un amplio espectro de público.
David Serrano, director de Días de Fútbol, lo resume asegurando que "si tienes un proyecto y te dan más desgravación fiscal en el caso de que lo dirija una mujer, ¿qué productor va a contratar a un hombre?". El realizador es consciente de "la que me va a caer, me van a decir que soy un ‘señoro’ y poco menos que de extrema derecha".