(LIbertad Digital) Luis Aragonés, que no pudo llevar a buen término la expectativas españolas en el Mundial de Alemania, sí lo ha hecho en su segundo gran desafío en esta fase de clasificación para la Eurocopa 2008. Y lo ha conseguido a pesar de un nefasto comienzo, con dos derrotas en los tres primeros partidos, que desataron un auténtico huracán de críticas en su contra. Al técnico no le tembló el pulso cuando tomó la determinación de excluir a Raúl González del grupo. Algo impensable hasta entonces. Una decisión complicada, impopular y arriesgada. Un disparo que le podía salir por la culata en cualquier momento. Pero el técnico se ha mostrado impertérrito en su propuesta y la ha mantenido contra viento y marea.
El Santiago Bernabéu no se llenó para asistir a tal acontecimiento, pero vibró con la selección y se acordó en la segunda mitad del gran ausente, Raúl González, cuando ya España tenía el partido perfectamente encarrilado y la clasificación en el bolsillo. El partido se desarrolló de acuerdo a lo previsto. No hubo sorpresas. Los dos técnicos habían enseñado sus cartas en los días previos. España iba a tener el balón y Suecia le iba a esperar para intentar sorprender al contragolpe, con velocidad y por las bandas. Así fue. Los de Aragonés volvieron a exhibir el toque, como lo habían hecho el 13 de octubre en la victoria ante Dinamarca y los escandinavos asustaron en los primeros minutos. Lo hizo Ibrahimovic en un par de ocasiones, pero todo fue un espejismo.
La posesión y el mando del partido era totalmente de España, que abusó del toque. Los futbolistas de Luis sobaron demasiado la pelota, pero adolecían de llegada. Tenían dificultades para llegar hasta David Villa, el único punta entre los fornidos defensas suecos. España se adueñó tanto del esférico que no tuvo necesidad de hacer una falta hasta el minuto 24, once después de que Capdevila se estrenase como goleador de la selección. Lo hizo en el minuto 13 al rematar desde dentro del área pequeña un saque de esquina botado por Xavi Hernández. Contó Capdevila con el beneplácito de los dos centrales suecos -Mellberg y Hansson-, que fueron meros espectadores.
El tanto terminó de tranquilizar el ánimo de España, que ya se veía en la Eurocopa sin necesidad de atender a lo que sucedía en Belfast entre Irlanda del Norte y Dinamarca, y no alteró el de Suecia, que siguió con la misma pobre sintonía. No estuvieron finos los suecos. Nunca se encontraron cómodos sobre el césped del Bernabéu. Quedaron encerrados dentro de la tela de araña del toque español y no supieron deshacerse de él. Y con ese dibujo fabricó España el segundo tanto. La jugada concluyó con una perfecta asistencia de Xavi a Silva y de éste a Iniesta, que firmó el tanto. Antes, Villa había estrellado un balón en el poste en el lanzamiento de una falta (m.30).
El partido y la clasificación para la Eurocopa estaban sentenciados y el Bernabéu lo celebró, aunque insistió en reclamar a Raúl. El segundo período sobró. Fue un paseo para España y una pesadilla para Suecia, que bajó los brazos y encomendó su suerte al partido del próximo miércoles frente a Letonia, en Estocolmo, para asegurar su presencia en Austria y Suiza. Sergio Ramos hizo el tercero (m.64) con un remate cruzado dentro del área y lo celebró a lo grande, con varias volteretas. El estadio era ya una fiesta. Austria y Suiza está en el horizonte.
Ficha técnica del partido
España, 3: Casillas; Sergio Ramos, Puyol, Marchena, Capdevila; Albelda, Iniesta (Joaquín, m.52), Cesc, Xavi, Silva (Riera, m.66); y Villa (Tamudo, m.52)
Suecia, 0: Isaksson; Nilsson, Mellberg, Hansson, Edman; Wilhelmsson (Bakircioglu, m. 78), Andersson (Kallstrom, m.46), Svensson, Ljunberg; Rosenberg (Allback, m.59) e Ibrahimovic
Goles: 1-0, m.13: Capdevila; 2-0, m.38: Iniesta; 3-0, m.64: Sergio Ramos
Árbitro: Roberto Rosetti (Italia). Mostró tarjeta amarilla al sueco Hansson (m.75) y al español Puyol (m.87)
Incidencias: Partido de clasificación para la Eurocopa de Austria y Suiza 2008, grupo F, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante unos 75.000 espectadores, entre ellos unos 6.000 seguidores suecos
El Santiago Bernabéu no se llenó para asistir a tal acontecimiento, pero vibró con la selección y se acordó en la segunda mitad del gran ausente, Raúl González, cuando ya España tenía el partido perfectamente encarrilado y la clasificación en el bolsillo. El partido se desarrolló de acuerdo a lo previsto. No hubo sorpresas. Los dos técnicos habían enseñado sus cartas en los días previos. España iba a tener el balón y Suecia le iba a esperar para intentar sorprender al contragolpe, con velocidad y por las bandas. Así fue. Los de Aragonés volvieron a exhibir el toque, como lo habían hecho el 13 de octubre en la victoria ante Dinamarca y los escandinavos asustaron en los primeros minutos. Lo hizo Ibrahimovic en un par de ocasiones, pero todo fue un espejismo.
La posesión y el mando del partido era totalmente de España, que abusó del toque. Los futbolistas de Luis sobaron demasiado la pelota, pero adolecían de llegada. Tenían dificultades para llegar hasta David Villa, el único punta entre los fornidos defensas suecos. España se adueñó tanto del esférico que no tuvo necesidad de hacer una falta hasta el minuto 24, once después de que Capdevila se estrenase como goleador de la selección. Lo hizo en el minuto 13 al rematar desde dentro del área pequeña un saque de esquina botado por Xavi Hernández. Contó Capdevila con el beneplácito de los dos centrales suecos -Mellberg y Hansson-, que fueron meros espectadores.
El tanto terminó de tranquilizar el ánimo de España, que ya se veía en la Eurocopa sin necesidad de atender a lo que sucedía en Belfast entre Irlanda del Norte y Dinamarca, y no alteró el de Suecia, que siguió con la misma pobre sintonía. No estuvieron finos los suecos. Nunca se encontraron cómodos sobre el césped del Bernabéu. Quedaron encerrados dentro de la tela de araña del toque español y no supieron deshacerse de él. Y con ese dibujo fabricó España el segundo tanto. La jugada concluyó con una perfecta asistencia de Xavi a Silva y de éste a Iniesta, que firmó el tanto. Antes, Villa había estrellado un balón en el poste en el lanzamiento de una falta (m.30).
El partido y la clasificación para la Eurocopa estaban sentenciados y el Bernabéu lo celebró, aunque insistió en reclamar a Raúl. El segundo período sobró. Fue un paseo para España y una pesadilla para Suecia, que bajó los brazos y encomendó su suerte al partido del próximo miércoles frente a Letonia, en Estocolmo, para asegurar su presencia en Austria y Suiza. Sergio Ramos hizo el tercero (m.64) con un remate cruzado dentro del área y lo celebró a lo grande, con varias volteretas. El estadio era ya una fiesta. Austria y Suiza está en el horizonte.
Ficha técnica del partido
España, 3: Casillas; Sergio Ramos, Puyol, Marchena, Capdevila; Albelda, Iniesta (Joaquín, m.52), Cesc, Xavi, Silva (Riera, m.66); y Villa (Tamudo, m.52)
Suecia, 0: Isaksson; Nilsson, Mellberg, Hansson, Edman; Wilhelmsson (Bakircioglu, m. 78), Andersson (Kallstrom, m.46), Svensson, Ljunberg; Rosenberg (Allback, m.59) e Ibrahimovic
Goles: 1-0, m.13: Capdevila; 2-0, m.38: Iniesta; 3-0, m.64: Sergio Ramos
Árbitro: Roberto Rosetti (Italia). Mostró tarjeta amarilla al sueco Hansson (m.75) y al español Puyol (m.87)
Incidencias: Partido de clasificación para la Eurocopa de Austria y Suiza 2008, grupo F, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante unos 75.000 espectadores, entre ellos unos 6.000 seguidores suecos