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Guardiola muestra su doble cara con Piqué

El entrenador ha querido zanjar una posible polémica con Piqué. Un día le critica y otro le abraza.

El entrenador ha querido zanjar una posible polémica con Piqué. Un día le critica y otro le abraza.
Guardiola abraza a Piqué. | EFE

El técnico del Barcelona tiene muy estudiada su forma de comunicar ante la prensa. Sabe que todos sus gestos son mirados con lupa y actúa en consencuencia.

El sábado dejó un recado a Piqué en rueda de prensa con su elogio a Isaac Cuenca: "Físicamente puede que no guste a las chicas, pero su trabajo es perfecto". Los periodistas que siguen la actualidad culé vieron un claro mensaje a Piqué, distraido con su relación con Shakira y aspectos extrafutbolísticos.

El asunto ha levantado cierto interés en Can Barça en la semana del clásico. Además, Piqué ha sido el único jugador teóricamente titular convocado para jugar el intrascendente partido de Champions ante el BATE Borisov. ¿Un castigo?.

Para un jugador mermado físicamente se puede hacer extraño participar desde el inicio en un partido de Champions a cuatro días del clásico. Sin embargo, precisamente Guardiola dijo que ése era el motivo por el que iba a contar con Piqué para el BATE: "Ha estado un tiempo parado y por eso lo convoco".

El entrenador, al que no gustó que Piqué forzara la amarilla de forma tan descarada ante el Rayo, quiso zanjar el asunto el lunes: "No hay caso Piqué. No hagáis interpretaciones".

Por si las palabras no fueran suficientes, Guardiola ha continuado con sus mimos al central. En una situación poco habitual, el entrenador ha abrazado al central y ha charlado con él animosamente -ante los fotógrafos por supuesto- justo después de salir al césped del Camp Nou.

De una manera evidente, Guardiola trataba de cerrar los rumores sobre un posible castigo que el técnico catalán habría aplicado al jugador al convocarle para el BATE.

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