
El baloncesto húngaro atraviesa una de sus mayores crisis tras el violento episodio protagonizado por Jericole Hellems, alero estadounidense de 26 años del Zalakerámia ZTE. El jugador agredió físicamente a un aficionado de su propio equipo después de la derrota por 83-90 ante el Kometa-Kaposvar, cuarta consecutiva del conjunto local, lo que desató un auténtico escándalo en el deporte del país.
Según informó la cadena pública M4 Sport, el incidente ocurrió al final del encuentro, cuando los jugadores del ZTE se acercaron a saludar a la afición. En medio de los reproches de algunos hinchas por el bajo rendimiento del equipo, Hellems inició una discusión con un seguidor que acabó con un golpe directo al rostro del espectador, un puñetazo. Desde ese mismo instante, la tensión se trasladó rápidamente al resto del pabellón, obligando a intervenir al personal de seguridad y a varios compañeros del jugador para contener la situación.
😱 Macaristan’da Zalakeramia takımından Jericole Hellems, kendisine sözlü olarak tepki gösteren taraftara yumruk atınca sözleşmesi feshedildi. pic.twitter.com/11SeawogDw
— Eurohoops Türkiye (@EurohoopsTR) November 4, 2025
El club actuó de inmediato y anunció la rescisión del contrato del estadounidense pocas horas después del altercado. En un comunicado, el ZTE calificó la agresión como "una conducta antideportiva que no puede ser ignorada" y explicó que el jugador "ya no forma parte del equipo". Al mismo tiempo, la entidad abrió una investigación interna para esclarecer las causas del incidente, asegurando que "otras personas también son responsables de lo ocurrido".
¿Cómo surgió la pelea? La tensión en el conjunto húngaro era palpable antes del encuentro. Si bien, la derrota ante el Kometa-Kaposvar acentuó el mal momento del conjunto de Zalaegerszeg, que apenas suma una victoria en nueve partidos. Recordemos que Hellems había llegado esta temporada al ZTE procedente del baloncesto estadounidense y con experiencia en ligas europeas, pero su rendimiento no logró revertir la dinámica negativa del equipo. En sus seis partidos con el club, promedió 11,8 puntos y 3,8 rebotes.
Crisis interna sin precedentes en el ZTE
La tensión generada por los malos resultados terminó derivando en una crisis interna. A la salida de Hellems se sumó la del entrenador Tamas Bencze, quien presentó su dimisión tras el episodio. "El baloncesto debe ser una celebración para familias y aficionados. Lo que ocurrió es inaceptable", afirmó el técnico en su despedida.
Por su parte, el club anunció la llegada del griego Kostas Mexas como nuevo entrenador, quien se mostró dispuesto a reconstruir el equipo: "Intentamos entender cómo hacer las cosas de forma diferente. Día a día y entrenamiento a entrenamiento, esperamos mejorar". El ZTE afronta ahora una etapa de reconstrucción en busca de recuperar la estabilidad deportiva y la confianza de su afición.

