"Vamos con las ganas de hacer un buen partido. Sabemos que el Madrid te puede ganar en cualquier momento, pero nosotros jugaremos como lo hemos hecho hasta ahora. Con respeto, pero sabiendo que podemos sacar un buen resultado", comenta. Bojan también destaca "que pase lo que pase" en el Bernabéu, "seguiremos siendo líderes y dependiendo de nosotros mismos" y reclamó que la afición siga apoyando a su equipo. "Me gustaría que la gente siga creyendo en nosotros. Creo que se puede seguir confiando en este equipo", indica.
Protagonista del empate sin goles ante el Chelsea, por la ocasión que falló en un remate de cabeza a falta de pocos minutos para el final del partido, Bojan dice que su única sensación es la de resignación. "Fue una lástima, pero ya no se puede hacer nada. Sólo quiero pensar en que la próxima, la meteré", desea.
Bojan deplora el estilo defensivo que el Chelsea desplegó en el Camp Nou -"nos va mal, pero si a un equipo así le haces un gol rápido, acaba por abrirse"- y rebaja la indignación que el vestuario del Barça expresó con el árbitro al término del partido. "No creo que tengan mala fe, se pueden equivocar, pero si nosotros hacemos las cosas bien, no tenemos que depender de los árbitros", ha dicho un Bojan que también confesaba que si hubiese convertido su ocasión de gol "no hablaríamos del árbitro".
El jugador del Barcelona, asimismo, lamenta la lesión de su compañero Rafa Márquez, que estará entre ocho y diez semanas de baja por una rotura de menisco. "Ha sido una lástima porque se trata de un jugador muy importante, pero tenemos que creer en los jugadores que tenemos", explicaba.