
Ya dijo Carlo Ancelotti que la mejor manera de no perder la concentración y la forma de cara al choque de Champions ante el Manchester City era tomarse en serio la Liga y pelear cada partido, rotando o sin rotar. Eso fue lo que hizo el Real Madrid ante el Celta con un partido solvente, en el que hubo rotaciones, sobre todo con Modric y Kroos, y que se resolvió con facilidad por la inoperancia ofensiva de los gallegos y el oficio de los madrileños.
El partido quedó encaminado en la primera parte y se terminó de rematar para el Real Madrid nada más comenzar el segundo tiempo. Los blancos se marcharon al descanso con un 1-0 merecido tras lo visto en estos primeros 45 minutos. El Celta empezó bien, pero se fue diluyendo, algo que aprovecharon los jugadores del Real Madrid para ir ganando terreno y generar ocasiones. De hecho acumularon tres o cuatro consecutivas antes de encontrar el merecido gol antes del descanso.
Todo nació de un fallo de Iago Aspas en una contra y acabó con la réplica del Real Madrid con centro atrás de Ceballos y disparo mordido, pero acertado de Asensio. Se adelantaba el Real Madrid que había tenido más y mejores que su rival. Eso sí, el Celta debería echarse las manos a la cabeza porque del posible 0-1 pasó a un 1-0 que condicionó el resto del partido.
Además, nada más comenzar la segunda parte llegó el 2-0 con un golazo de cabeza de Militao que dejó una vez más en evidencia que al Celta le falta mucha altura para poder defender este tipo de jugadas y más ante equipos como el Real Madrid. A partir de ahí, Ancelotti miró al banquillo y empezó a rotar pensando en los próximos partidos ligueros y por supuesto en la Champions ante el Manchester City.
El Real Madrid, liderado por un Camavinga estelar, apenas sufrió en el resto del partido y cuando lo hizo apareció la figura de Courtois para bajarle la persiana a Iago Aspas en el único mano a mano que tuvo el gallego. No fue ni mucho menos la noche del genio de Moaña que tuvo parte de culpa en el 1-0 y además falló dos claras en la segunda parte.
Con esta victoria, el Real Madrid asegura una jornada más la segunda plaza y sigue la estela del Barcelona a espera del duelo de este domingo ante el Atlético de Madrid.
