España y Alemania, dos de las grandes favoritas, cartel que se han ganado a pulso los españoles tras un gran inicio y los alemanes por su buen desempeño y por ser también anfitriones, se medirán este viernes en Stuttgart en los cuartos de final de la Eurocopa 2024, en lo que se presenta como una final anticipada para muchos aficionados.
Más allá de lo colectivo, con dos equipos a los que le gusta ser protagonistas con balón y que hacen de la verticalidad una obra de arte, habrá duelos individuales que marcarán el devenir del choque y que serán vitales para el desenlace final. Cinco duelos en forma de cinco claves.
Rodri - Kroos
Los dos directores de orquesta de sus equipos. Rodri y Kroos, líderes silenciosos pero autoritarios de sus selecciones, dirigen a su antojo el juego de los suyos. Todo balón pasa por su pies, toda idea surge en su cabeza. Todo buen hacer del equipo es consecuencia de su buen funcionamiento.
Para Toni Kroos, el duelo pasa por el centro del campo: "Los partidos de este tipo se ganan en el centro del campo. El que ganes los duelos, el control, tendrá más opciones. No hay duda de que cada equipo tiene jugadores que pueden marcar las diferencias, pero somos dos equipos que quieren tener la posesión", dijo en rueda de prensa.
Por lo tanto, el que salga vencedor de este duelo de centrocampistas, clásico del fútbol, histórico por el nivel de ambos, especial por ser el último pase lo que pase, tiene todas las papeletas para estar en las semifinales de la Eurocopa 2024.
Nico Williams - Kimmich
En el perfil diestro defensivo alemán, en el zurdo ofensivo español, se cuecen también buena parte de las opciones de ambos equipos. Nico llega como un avión al duelo, Joshua más comedido, algo más sufrido en su vuelta al lateral derecho.
Será un duelo entre uno de los delanteros más regateadores del torneo y uno de los laterales que más sufre en el repliegue. Nico es el segundo delantero que más regates intenta de toda la Eurocopa, solo superado por Jeremy Doku, que también ha tenido más minutos porque Nico no jugó la tercera jornada de la fase de grupos.
De entre los delanteros, es el que más pases al área da, el que más centros con éxito coloca, el sexto con más pases al área con éxito y, quizá el más importante, es el décimo que más toques da dentro del área.
Lugar en el que más sufre Kimmich. En campo propio ha tenido 7 duelos y solo ha ganado 3. Ha perdido 4. No entra en el top-10 de laterales que ganan duelos defensivos en esta Eurocopa. Y eso que es el tercero que más duelos ha disputado si solo se tienen en cuenta a España y Alemania, por detrás de Marc Cucurella y Jesús Navas.
Ha ganado 1 duelo menos que Carvajal, pero habiendo jugado un partido más. Porque Kimmich no ha descansado. Lo ha jugado todo. Los 4 partidos al completo.
Carvajal - Musiala
En la diagonal perfecta al duelo anterior se enfrentan la veteranía y la inocencia. Un lateral curtido con un extremo brillante recién nacido. Un jugador clásico con uno de la nueva escuela.
Condicionado a caer a banda izquierda por la más que probable titularidad en el once de Leroy Sané y por la presencia de Ilkay Gundogan en el la media punta, Musiala es un jugador que tiende a caer hacia el centro, pero que tendrá que abrir el juego para dar amplitud a la 'Mannschaft', por lo que tendrá que bailar con Carvajal, con el que no coincidió en las semifinales de la Liga de Campeones.
En el duelo de ida en Múnich, en el que Musiala cayó en banda izquierda, el español estaba sancionado; y en la vuelta en el Santiago Bernabéu, Musiala formó como enganche, por lo que tuvieron pocos duelos individuales.
Cucurella - Sané
En el otro lado se medirán Cucurella y Sané. El mejor lateral izquierdo de toda la Eurocopa, una certeza asentada en España contra un extremo que ha tenido que ganarse el puesto en el ataque, pues fue suplente los 3 primeros partidos de fase de grupos y solo entró en el once en octavos.
De hecho, podría ser Florian Wirtz el que compareciera como titular, pero por el tipo de juego de España, con esa presión alta, la velocidad de Sané para salir rápido tras robo parece convencer más A Nagelsmann.
Acertado en el corte en todos los partidos, es el quinto que más duelos defensivos ganas de todos los laterales de la Euro, tendrá que estar especialmente atento a su espalda y especialmente certero en sus entradas cuando Sané inicie sus clásicas conducciones een diagonal.
Morata - Rudiger
Álvaro Morata no tuvo su partido ante Georgia. Era difícil para cualquier delantero por el estilo y el planteamiento de los georgianos, pero ante Alemania tendrá más huecos para explotar su velocidad y sus virtudes. ¿El problema? Que Antonio Rudiger será su par durante todo el encuentro.
El central del Real Madrid acumula 49 recuperaciones en la Eurocopa. Solo el italiano Alessandro Bastoni (53), del Inter; el danés Jannik Vestergaard (52), del Leicester; y el también danés Joachim Andersen (51), del Crystal Palace, están por delante de él como centrales que más recupera.
El duelo de los banquillos
De la Fuente y Nagelsmann son dos entrenadores debutantes en una Eurocopa que han devuelto la competitividad a dos selecciones ancladas en el pasado, con una manera similar de entender el fútbol aunque en un momento vital muy distinto, citándose este viernes ante el desafío más importante de sus respectivas carreras, luchando por un puesto en las semifinales de la Eurocopa 2024.
Para Luis de la Fuente y Julian Nagelsmann, la cima ha llegado en momentos muy diferentes. El seleccionador de la 'Mannschaft' tiene tan solo 36 años, cumple 37 el próximo 23 de julio, pero mucha experiencia en equipos de máxima exigencia. Su historia es curiosa porque como jugador estuvo a las órdenes de Thomas Tuchel, al que al final acabó enfrentándose en los banquillos.
Luis de la Fuente, por su parte, con una dilatada carrera como futbolista que no tuvo su homólogo germano, ha encontrado a sus 63 años la gran oportunidad de su vida, alejado de los focos durante toda su carrera como técnico pese a los grande éxitos con las categorías inferiores de la selección española.
Un contraste de vidas, que no de estilos, que se dará cita este viernes en Stuttgart por un hueco en las semifinales de esta Eurocopa 2024.
Estilo en común: inicios de partido fulgurantes, control del partido y verticalidad
Pese a esa discordancia en la manera de llegar a la cima y la diferencia generacional, hay muchas cosas que les unen en lo futbolístico.
Los partidos de ambas selecciones tienen inicios frenéticos, con presiones abrasadoras: Alemania ha marcado en los primeros compases a Escocia (m.12, m.19), a Hungría (m.22) y a Dinamarca (m.4, aunque anulado); y España ante Albania (m.13) y ante Croacia, con una primera parte en la que cerró con un 3-0.
Ambos quieren la posesión, pero no de cualquier la manera. Tiene claro a qué zonas llevar el cuero para hacer daño, cómo generar las superioridades por banda y finalizan en cuanto tienen opción. Son selecciones mucho más efectivas que hace unos años.
Y es que, a falta de siete encuentros para completar los 51 del torneo, el conjunto anfitrión, con 10 goles en 4 partidos, está seguido por España, con 9 tantos. Los disparos desde fuera del área, claves.
Gran culpa de eso es la apuesta por los jugadores verticales. Lamine Yamal y Nico Williams en España; Jamal Musiala, Leroy Sané y Florian Wirtz en Alemania. Jugadores que van a otra marcha, con desborde y con la portería entre ceja y ceja. De la posesión estéril, a la posesión efectiva con peligro por las bandas, con la verticalidad por bandera.
Para Julian Nagelsmann y para Luis de la Fuente, este es uno de los partidos más importantes de su carrera, si no el que más. Tienen la oportunidad de hacer algo grande en esta Eurocopa, en un partido que es una final anticipada para muchos. Dos estilos similares, dos maneras diferentes de haber alcanzado la cima. Dos grandes desafíos que se darán cita en Sttutgart este viernes.
Musiala, su mayor amenaza
Jamal Musiala es de esos futbolistas de la nueva generación. Son muy completos, pero sobre todo muy jóvenes. Nacido hace 21 años en Alemania, el actual '10' de la 'Mannschaft' es un jugador hábil entre líneas, un virtuoso del regate y de la interpretación del juego. Es casi como si trasladara su pasión por el ajedrez al campo. Ante España, en los cuartos de final de la Eurocopa, será una suerte de Magnus Carlsen con botas de fútbol.
Porque así ve el fútbol Musiala, como una partida del ajedrez que tanto le gusta. Es reflexivo, interpreta bien lo que pasa a su alrededor y, sobre todo, se anticipa a lo que puede pasar. Es un peligro absoluto para los de Luis de la Fuente, que tendrán que estar muy hábiles para frenar su juego.
"Ya no soy tan bueno como solía ser en el club de ajedrez de la escuela", reconoció en una entrevista con el diario alemán 'Spiegel'. "El ajedrez es genial, es bueno distraerse un poco del fútbol. Tienes que pensar mucho, te aclara la cabeza", añadió.
A Musiala le gusta pasar parte de su tiempo libre con el ajedrez y, aunque reconoció que no es capaz de ganar a su capitán, Joshua Kimmich, le sirve como entrenamiento para enfrentarse a España.
"Hay que pensar mucho en el ajedrez. En tus próximos pasos, en tu oponente y en los próximos movimientos que probablemente hará en el tablero. Tengo que anticiparme. Eso es exactamente lo que hago como futbolista. Tengo que saber hacia dónde va la pelota. Tengo que adivinar qué hará el oponente. Y siempre tengo que intentar ir dos o tres pasos por delante", explicó.
Curioso como un jugador con tanta libertad en el campo, casi anárquico por su propia naturaleza, encuentra la tranquilidad en el orden de un tablero de cuadros blancos y negros.
Parece que cuando juega es uno de esos jugadores tocados por una varita mágica. Pero lo cierto es que sus estadísticas no esconden su trabajo. Casi 34km recorridos, a una media de casi 8 por partido; un 92% de precisión en el pase y una velocidad media de 33.28 km/h, según datos de la UEFA.
Incluso él mismo quiso acabar con ese mito de que es solo un elegido. Hay mucho esfuerzo detrás. "Tengo que pensar mucho en mi juego. Antes de recibir la pelota, escaneo todo a mi alrededor. ¿Dónde estoy?, ¿dónde está el rival? Sé lo que voy a hacer a continuación antes de que me llegue la pelota", como en el ajedrez.
"Miro quién de mis compañeros quiere el balón y sé qué pase prefiere. A Kroos le gusta cambiar de orientación con un pase largo. Antes de que dé el pase, corro hacia el área para poder estar allí y ser peligroso. Cuando llego al balón, estoy un segundo por delante del oponente", insistió. Todo está en su cabeza perfectamente trabajado. No es solo instinto", dijo.
Eso sí, cuando tiene el balón, la cosa cambia: "Con el balón en los pies es más intuitivo. En estos momentos ya no tengo tiempo para pensar mucho. Pero todo lo que hago antes de recibir el balón es estrategia. En los 90 minutos de un partido, sólo tengo el balón en los pies quizás dos o tres minutos. En el resto tengo que correr y pensar".
Musiala es un jugador muy maduro para su edad. Y ya no solo dentro del campo, que lo demuestra cada vez que juega, sino fuera.
"Quizá Jude (Bellingham) y yo somos más maduros porque pudimos jugar en los primeros equipos de Dortmund y Munich desde jóvenes. Aprendimos mucho de los jugadores mayores, lo que quizás nos hizo crecer antes. Incluso cuando no jugaba mucho en el Bayern, observaba, por ejemplo, cómo se preparaba Thomas Müller, cómo hacía los ejercicios y a qué prestaba atención. Eso te hace mejor", destacó.
Y parte de su éxito es también gracias a alejarse de la redes: "Las redes sociales también pueden ser peligrosas. Solía prestar mucha atención a los comentarios. Pero me di cuenta de que no era bueno para mí. Hoy prefiero recibir 'feedback' de la gente que es realmente importante para mí: mi familia, los entrenadores, mis compañeros".
En Sttugart Arena, en el que habrá mayoría alemana, Julian Nagelsmann alineará a diez futbolistas y a Jamal Musiala, jugador que convierte el campo en un tablero y a sus rivales en caballos, peones, torres y alfiles. Una partida de ajedrez con unas semifinales en el horizonte.
Terminar con la maldición
Desafiando al pasado, sin atender a la historia que devuelve a escena la incapacidad de España para superar a ningún anfitrión -jamás ha sido capaz en la historia de tumbar a un combinado organizador de un Mundial o una Eurocopa, con el descaro por bandera que representan dos nuevos referentes, Lamine Yamal y Nico Williams, y confiando en el fútbol que volvió a situarla entre las favoritas, aparece en cuartos de final el gran reto, tumbar a los teutones y meterse en semifinales.