Matías Soulé marca un golazo vestido de Maradona y Suzuki se la devuelve con una doble parada a lo Casillas

En una Roma que no pasa por sus mejores horas en los últimos años, sumergida en una novena posición, los de Claudio Ranieri no han encontrado un líder al que aferrarse. Ante la ausencia de goles de Artem Dovbyk y la lesión de Paulo Dybala en el partido de Europa League ante el Porto, fue Matías Soulé el encargado de llevar los tres puntos a la capital de Italia.

El argentino de 21 años fue el segundo fichaje más caro del equipo por detrás de Dovbyk. 25,6 millones de euros fue lo que pagaron a la Juventus por hacerse con los derechos del mediapunta forjado en Turín.

Gol de falta que recuerda a Maradona

Este mismo año se cumplen 40 años del mítico gol de Maradona con el Nápoles a la Juventus de falta. Fue un 3 de noviembre de 1985 cuando el colegiado señaló una falta por juego peligroso dentro del área juventina. Una falta indirecta en la que Maradona tuvo que esperar el primer toque de su compañero para poder disparar a puerta. Una definición perfecta a la escuadra derecha, donde nada pudo hacer el guardameta para evitar uno de los mejores goles de ‘El Pelusa’.

Casi cuatro décadas después, un argentino ha vuelto a regalar un golazo perfecto de falta que recuerda, y mucho, al de Maradona. Con la zurda, de interior y con la rosquita perfecta para dar en el palo derecho y entrar por toda la escuadra, como si de una obra de arte se tratara. Superando a la barrera parmesana y dejando al portero inmóvil ante la imposibilidad de llegar ante tal disparo.

La doble parada de Suzuki que recuerda a Casillas

Aunque en el tanto no pudo hacer nada, Zion Suzuki hizo todo lo posible por intentar conseguir algún punto. Si antes decíamos que Soulé se había vestido de Maradona durante el partido de ayer, del guardameta nacido en Estados Unidos e internacional con Japón podríamos decir que se vistió de Iker Casillas.

Una internada por la banda derecha del argentino le permitió plantarse solo ante el internacional japonés, quien sacó una gran mano abajo ante el tiro raso pegado al palo derecho de Suzuki. No le valió con esta gran mano, sino que tuvo tiempo de levantarse rápido ante el rechace en los pies de Salah-Eddine.

Al futbolista holandés le cayó el rechace estando totalmente solo y con toda la portería por delante, pero, por ímpetu y esfuerzo, de nuevo Suzuki, sobre la línea, imposibilitó el segundo gol del encuentro. Cuesta creer que ese balón no entrara, pero como se demuestra en la imagen posterior del VAR, no llega a rebasar en su totalidad la línea blanca. Una gran acción en la que rebaña la bola sobre la línea, hace que dé en el palo derecho y logra así volver a coger el balón.

Sin ninguna duda, es la parada de lo que llevamos de año y seguramente lo sea de la temporada, al puro estilo Casillas en Sevilla, primero a Perotti y, unos años más tarde, con Manu del Moral.