
Poco a poco se van conociendo decisiones que determinarán el aspecto definitivo de la plantilla con la que el Real Madrid afrontará la temporada 2025/26, la primera de Xabi Alonso como entrenador tras el adiós de Carlo Ancelotti. Tras la llegada de Dean Huijsen, Trent Alexander-Arnold y Álvaro Carreras, el club quiere fichar otro central y los jugadores que más gustan son los franceses William Saliba (Arsenal) e Ibrahima Konaté (Liverpool). El Madrid echará el resto por fichar al futbolista de los Reds, teniendo en cuenta que el precio de Saliba (unos 80 millones de euros) es prohibitivo.
Pero más pendiente, si cabe, está el Madrid de jugadores cuyo futuro parecen estar en el aire. Es el caso de Dani Ceballos, a quien se ha vuelto a colocar este verano en la rampa de salida y que de nuevo se encuentra en la órbita del Betis.
Sin embargo, según ha podido saber Libertad Digital, Xabi Alonso ha transmitido al presidente Florentino Pérez y a la entidad que quiere contar con el utrerano al menos una temporada más, a pesar de que tampoco le dio demasiados minutos en el último Mundial de Clubes (un total de 70 repartidos entre cuatro partidos, siempre saliendo desde el banquillo, quedándose sin jugar en el debut ante el Al Hilal y en semifinales frente al Paris Saint-Germain). La respuesta del club, también clara: Ceballos no va a ser traspasado salvo que llegue una oferta absolutamente irrechazable.
Xabi Alonso no quiere que Dani salga, pero es que además el Madrid tampoco encuentra en el mercado un recambio que sea igual de bueno a un precio similar.
Quien tampoco abandonará el club es Eduardo Camavinga. El francés, que está yendo de más a menos y cuyo rendimiento esta pasada temporada ha dejado que desear, ha sido tanteado por varios equipos de la Premier League, pero ya ha dejado claro a su entorno más cercano que no se plantea la posibilidad de salir.


