
En el Real Madrid viven con disparidad la situación que se les ha planteado con dos de sus jugadores deseados. Existe una contraposición de situaciones que da fe de la locura de mercado que se está viviendo en los últimos años. Esos dos jugadores por los que suspira la cúpula del Real Madrid no son otros que Donny Van de Beek y Paul Pogba. Uno jugador del Ajax y el otro estrella en el Manchester United. Mientras que uno parece tener toda su operación salida de Holanda encarrilada, el otro parece abocado a tener que volver a vestir una temporada más -como mínimo- la camiseta de los red devils.
La salida de Van de Beek del Ajax parece más sencilla de lo que se planteó en un principio. El jugador está deseando vestir la camiseta blanca y no se ha escondido a la hora de admitir que ha habido contactos entre su agente y el club madridista. Si ya habló e hizo públicas las intenciones en la previa al primer partido de Eredivisie, tras el encuentro tampoco quiso rehuir hablar de la su situación: "El Madrid está en contacto con el Ajax, hay interés, pero no puedo decir más. Mi agente ha hablado con ellos, pero prefiero hablar de fútbol".
onny Van de Beek ha vuelto a hablar: "El Madrid está en contacto con el Ajax, hay interés, pero no puedo decir más. Mi agente ha hablado con ellos, pero prefiero hablar de fútbol...".
— El Primer Palo (@eselprimerpalo) August 4, 2019
Por lo tanto, en el Real Madrid pueden estar bastante tranquilos con la situación, porque parece que el neerlandés llegará en poco tiempo y podría no tardar en hacerse oficial su fichaje. Las cifras que se barajan para terminar de cerrar su contratación podrían girar en torno a los 60 millones de euros (incluidas las variables por objetivos).
Las palabras de Solskjaer parecen cerrar la puerta
En la otra cara de la moneda se encuentra Paul Pogba. El francés fue taxativo con su futuro: "Busco nuevos retos". Un gesto que fue bien recibido en las oficinas del Bernabéu, pero que no gustó nada en el seno del Manchester United. Pese a que Pogba habló con Solskjaer para abandonar Old Trafford pidiéndole que le dejase salir, el técnico noruego fue rotundo en sus palabras tras su último amistoso ante el Inter de Milan: "No tengo ningún tipo de duda de que Pogba seguirá con nosotros al final del verano".
Las alarmas saltaron cuando el jugador francés no viajó con el resto del equipo para la mencionada cita ante el Inter por unas molestias en la espalda. Algo que desde Inglaterra interpretaron como un signo de rebeldía. Sin embargo, Solskjaer acalló todos esos rumores asegurando que era algo hablado con el jugador y que probablemente no estaría para el resto de la semana con ellos.
Como pudieron saber Libertad Digital y esRadio, Pogba es una prioridad. Ahora el tiempo corre en contra del Real Madrid, porque el 8 de agosto se cierra el mercado en la Premier League y el Manchester está cerrado en banda a negociar. No quiere dejar salir a Pogba, independientemente de la cantidad que ponga sobre la mesa el club presidido por Florentino Pérez. El sueño de Zidane de traer a Pogba al Santiago Bernabéu parece esfumarse cada segundo que pasa. Ni si quiera los 180 millones de euros de los que se habló en un principio parecen convencer a la cúpula del United y, lo que está claro, es que el Madrid no acometerá ninguna locura por él.

