
Sevilla, Athletic y Mallorca se meten en cuartos de final tras ganar al Getafe, el Deportivo Alavés y el Tenerife.
El Sevilla asalta el Coliseum
Isaac Romero, en su segundo partido con el primer equipo del Sevilla, vivió una noche de ensueño en el Coliseum, dónde dos goles suyos permitieron al equipo hispalense acceder a cuartos de final de la Copa del Rey y eliminar al Getafe, que marcó por medio de Jaime Mata tras un fallo de Sergio Ramos, que antes había abierto el marcador.
Con el contratiempo de última hora por la baja de Marko Dmitrovic, al que suplió bajo palos Alberto Flores, el Sevilla se recompuso pronto golpeando a su rival nada más comenzar. Lo hizo a los ocho minutos por medio de Sergio Ramos, que se aprovechó de una mala salida de David Soria en un córner botado por Suso para rematar de cabeza a gol y adelantar a su equipo.
El Getafe no se vino abajo pese al tempranero gol encajado y trató de hacer su juego al ritmo que marcaron Luis Milla y el británico Mason Greenwood, que fueron los que aportaron algo de imaginación con el balón en los pies.
El empate llegó a los 23 minutos tras un fallo de Sergio Ramos, que peinó mal hacía atrás un balón largo de Juan Iglesias que recogió en el área Juan Mata. El madrileño, con calma, resolvió la jugada elevando el esférico por encima de Alberto Flores.
Ese gol dio alas al Getafe, que se mostró más aguerrido sobre el césped que su rival, que no encontró los mecanismos para implantar su juego con futbolistas como el francés Boubakary Soumaré, el suizo Djibril Sow o el argentino Lucas Ocampos.
Todo cambió en la segunda parte, cuyo inicio fue un calco de la primera, con un arranque fulgurante del Sevilla, que en menos de diez minutos golpeó dos veces en dos llegadas.
La primera fue con un balón largo a la espalda de la defensa del Getafe, que estuvo lenta para tapar el hueco por el carril derecho. Ocampos apuró línea de fondo y puso un centro perfecto al corazón del área para que Isaac Romero rematara a placer sin oposición.
Poco después el canterano redondeó su noche de ensueño al culminar con la zurda, con un disparo por bajo dentro del área que superó a David Soria, un contragolpe comandado por Ocampos.
Esos dos goles dejaron muy tocado al Getafe. José Bordalás lo vio desde la banda, movió ficha y dio entrada en pocos minutos a cinco jugadores de refresco, entre ellos Carlos Aleñá, Jordi Martín y el turco Enes Unal, los tres con el objetivo de dar otro aire al ataque.
Esa apuesta no permitió al Getafe recortar distancias aunque sí le llevó a someter al Sevilla, que tuvo que retrasar sus líneas y comenzar a defenderse ante el asedio de los locales, poco acertados en los últimos metros.
El pitido final llevó el delirio a los jugadores del Sevilla, necesitados de alegrías tras la mala racha que encadenan en Liga, un campeonato en el que el Getafe ahora tendrá que centrar todos sus esfuerzos con la permanencia como objetivo.
Ficha técnica:
Getafe, 1: Soria; Iglesias, Djené, Gastón (Alderete, m.65), Diego Rico (Jordi Martín, m.65); Maksimovic (Aleñá, m.65), Milla, Greenwood, Mata (Oscar Rodríguez, m.58); Mayoral y Latasa (Enes Unal, m.58).
Sevilla, 3: Alberto Flores; Juanlu (Navas, m.46), Nianzou (Marcao, m.80), Badé, Sergio Ramos, Pedrosa; Soumaré, Sow (Agoumé, m.80), Suso (Rakitic, m.66), Ocampos; e Isaac Romero (Mariano, m.70).
Goles: 0-1: M.8 Sergio Ramos; 1-1: M.23 Mata; 1-2: M.48 Isaac; 1-3: M.54 Isaac.
Árbitro: Alejandro Muñiz Ruiz (Comité gallego). Amonestó a Mata (m.80), por protestar desde el banquillo del Getafe; y a Nianzu (74) y Agoumé (90+6), del Sevilla.
Incidencias: partido correspondiente a los octavos de final de la Copa del Rey disputado en el Coliseum de Getafe (Madrid), ante 12.581 espectadores. Antes del partido, los jugadores del Getafe lucieron una camiseta con un mensaje en apoyo a los enfermos de ELA y se guardó un minuto de silencio en memoria del padre de Santos Ramírez, miembro del cuerpo técnico del club madrileño.
El Ahletic tumba al Alavés con un doblete de Villalibre
Asier Villalibre, con dos bonitos goles que doblegaron al Alavés en San Mamés, llevó al Athletic Club a cuartos de final de la Copa del Rey, una clasificación merecida de los de Ernesto Valverde pero también peleada por los de Luis García Plaza, que pudieron empatar justo antes del 2-0 definitivo.
Abrió el marcador el 'Búfalo' cerca de la media hora del choque con un disparo que empieza a ser marca de la casa, un durísimo chut con la zurda ante el que Antonio Sivera no pudo ni reaccionar. El ariete había recibido de Oihan Sancet y después superado a Nahuel Tenaglia en la porfía por el balón.
El segundo tanto del Athletic fue una preciosa combinación rojiblanca iniciada por Alex Berenguer, con un sutil pase en profundidad a Oscar de Marcos y un no menos brillante centro del segundo capitán bilbaíno para que rematase Villalibre a placer, y en plancha, en el segundo palo.
Este triunfo es el sexto consecutivo del Athletic, que solo conoce la victoria en 2024 y encadena ya un total de 14 partidos sin perder. Cuatro de ellos han sido las cuatro rondas que lleva disputadas de la Copa del Rey, en la que estará un año más en el sorteo de cuartos de final. Los últimos cuatro años estuvo también en los de semifinales.
El Alavés, lleno de rotaciones como también el Athletic, quizás haya sido el rival que más le ha disputado la victoria al conjunto de Valverde en su excepcional racha. En lo que va de 2024, seguro.
Si Samu Omorodion y/o Giuliano Simeone no se hubiesen encontrado con dos enormes paradas de Julen Agirrezabala, que salvó a su equipo del 1-1 al inicio de la segunda mitad, quizás las cosas hubiesen acabado de manera diferente.
Aunque ya antes del minuto Berenguer había intentado un chilena en el área visitante, a centro de Sancet, choque comenzó parejo y sin demasiado ritmo. Con segunda unidad vitoriana plantando cara al tampoco bloque titular del Athletic, que parecía echar en falta el poderío en las bandas de los Williams.
Ya que Ernesto Valverde dio de inicio descanso al pequeño de los Williams, aún estando el mayor en la Copa de África.
En ese escenario inicial llegó la mejor ocasión visitante en la primera mitad, un disparo sin mucho ángulo pero muy duro de Hagi, que atajó bien un Agirrezabala que rectificó en la salida. Por ahí, por los cambios de orientación largo al hoy extremo rumano, llegó el peligro alavesista.
Pero los leones se fueron desperezando y, apoyados en el inmenso trabajo de Prados, que lo barría todo, y lanzados por Sancet, se hicieron pronto con el control del juego.
Les faltó finura en las primeras oportunidades, a Muniain y Herrera en dos disparos fallidos y a Sancet en un cabezazo, pero el Athletic fue afinando y a partir del ecuador de la primera mitad cada llegada era un ocasión de gol.
La primera, además, fue dentro. Un duro disparo con la zurda de Villalibre, que recibió de Sancet y ganó la acción por insistencia a Tenaglia. Un golazo propio de los grandes ausentes en ese primer tiempo: los Williams.
El tramo final de la primera mitad fue un asedio rojiblanco, que no llegó a decantar ya el choque de cara a la segunda porque Sivera se agigantó a un disparo desde la frontal de Berenguer, tras un precioso pase de Sancet.
Menos atinado estuvo el media punta navarro, que mandó al limbo un buen pase de Villalibre tras haber recuperado el balón el 'Búfalo' en una brillante acción individual.
Un centro de De Marcos que apuntaba a pase de gol a Villalibre que cortó Tenaglia, y un disparo cruzado que se le fue unos centímetros fuera a Munain cerró el asedio local hasta el segundo tiempo.
Aunque la continuación arrancó dos grandes ocasiones vitorianas y dos paradones de Agirrezabala a disparos casi a bocajarro de Samu y Giulano Simeone.
El primero remató a placer un centro desde la izquierda de Parada que se envenenó al tocar en un jugador local; y el hijo del Cholo remató más fácil aún un pase ya en el borde del área pequeña del ariete internacional sub-21. Giuliano no se podría creer la intervención del portero guipuzcoano.
No llegó el 1-1 que planeó esos minutos en 'La Catedral' y el Alavés lo pagó caro, ya que el Athletic sí aprovechó la primera suya. Un centro perfecto de De Marcos a la cabeza de Villallibre que el ariete remató en plancha. Un sutil golpeo de Berenguer buscando la profundidad de De Marcos.
Es el sexto gol y el tercer doblete en esta edición de la Copa del 'Bufalo' de Gernika, que ya marcó dos goles en el 0-3 ante el Cayón en El Sardinero en la segunda ronda y otros dos al Eibar en Ipurua en dieciseisavos de final.
No se arrugó el Alavés, que en un cuarto de hora le ha hecho más peligro al Athletic que todo el que habí sufrido en lo que va de 2024. La tercera ocasión visitante tras el descanso fue un gran centro de Hagi desde la derecha buscando a Samu en el segundo palo que cortó, muy bien colocado, Paredes.
Hasta ahí llegó en encuentro, que se fue apagando entre el carrusel de cambios entre ambos equipo y la clara distancia en el marcador.
Ficha técnica:
Athletic Club, 2: Agirrezabala; De Marcos, Vivian, Paredes, Lekue (Yuri, m.70); Prados (Jauregizar, m.86), Herrera; Berenguer (Nico, m.70), Sancet (Unai Gómez, m.78), Muniain (Adu Ares, m.78); y Villalibre.
Deportivo Alavés, 0: Sivera; Sola, Tenaglia (Rafa Marín, m.76), Duarte (Maras, m.76), Víctor Parada (José de León, m.87); Antonio Blanco (Selu Diallo, m.66), Benavidez; Alkain, Giuliano Simeone (Guridi, m.66), Hagi; y Samu Omorodion.
Goles: 1-0, m.28: Villalibre. 2-0, m.60: Villalibre.
Árbitro: César Soto Grado (Comité Riojano). Mostró tarjeta amarilla a los visitantes Benavidez (m.71) y Rafa Marín (m.90).
Incidencias: Eliminatoria de octavos de final de la Copa del Rey disputada, a partido único, en San Mamés ante 45.233 espectadores. Dato oficial. Entre ellos unos 600 seguidores visitantes.
Angustiosa y dolorosa derrota del Tenerife ante el Mallorca
Una angustiosa y dolorosa derrota del CD Tenerife ante el RCD Mallorca priva al cuadro tinerfeño del pase a la siguiente ronda después del tanto balear que llegó en la última jugada del encuentro.
El gran estímulo en juego como un pase a cuartos de final no dio lugar a contemplación alguna, con una única premisa por parte de ambos contendientes, presión inicial permanente al rival, no sólo para intimidación mutua sino también para hacer todo lo necesario para anotar un tanto con el que encauzar la eliminatoria.
La primera tentativa la protagonizó el local Gallego con un disparo cruzado que se fue junto al poste izquierdo de Greif (m.3), mientras que por parte visitante Abdón también puso a prueba a Tomeu Nadal con un preciso remate, tras un centro desde la derecha de Amath, pero el meta envió a córner el remate del atacante.
El encuentro, a partir de este peligroso remate, transcurrió con la misma intensidad y cadencia por parte de ambos adversarios, pero con una carencia total de remate en las dos porterías, de ahí la imposibilidad de que se moviese el marcador en los minutos transcurridos hasta concluir una animada y divertida primera parte.
Tras la preceptiva pausa de quince minutos, el juego prosiguió con una vivacidad inferior a la del inicio y con determinaciones algo más cautelosas, al menos en la primera media hora, puesto que en el cuarto final destacó primeramente un remate de Abdón (m.82) que se fue fuera por muy poco.
Ante esta falta de eficiencia y con el marcador a cero hubo que prorrogar el encuentro media hora más de juego, con una primera parte del tiempo extra sin nada que destacar en el plano ofensivo, salvo un más que un evidente agotamiento a la hora de aproximarse a puerta.
Nada más comenzar el segundo periodo de la prórroga Darder lanzó una falta desde la frontal para que Nadal, con algunos apuros, enviara el balón a córner, y poco después fue Giovanni el que también, desde lejos, ocasionó un gran sobresalto al meta local que también resolvió la situación despejando el balón.
Y cuando ya ambos técnicos así como también sus respectivas plantillas estaban pendientes de la tanda de penaltis, llegó el tanto bermellón por mediación de Larin, que en el último instante del choque se encontró un balón suelto dentro del área y próximo al punto de penalti y con un disparo rasó selló el pase a cuartos.
Ficha técnica:
CD Tenerife, 0: Tomeu Nadal; Aitor Buñuel, Sipcic, José León (Loïc, m.84), Medrano; Sergio González, Aitor Sanz; Alexandre (Álvaro Jiménez, m.84), Roberto López (Luismi Cruz, m.80) (Bodiger,m.80), Teto (Rahmani, m.74); y Enric Gallego (Ángel, m.104).
RCD Mallorca, 1: Greif; David López (Antonio Sánchez, m.62), Nastasic, Copete (Dani Rodríguez, m.56); Giovanni, Darder (Samu Costa, m. 116), Mascarell, Van der Heyden (Toni Lato, m.56); Amath (Raillo, m.56), Javi Llabrés (Larin, m.72); y Abdón.
Goles: 0-1, M.120+1: Larin.
Árbitro: Mario Melero López (Comité Territorial Andaluz).
Amonestó al local Álvaro Jiménez (m.96), y al entrenar visitante Javier Aguirre (m.41), así como también a sus jugadores Amath (m.36), Raillo (m.73), Mascarell (m.79), Javi Llabrés (m.97) (en el banquillo), Dani Rodríguez (m.99) y Giovanni (105+2).
Incidencias: Partido de los octavos de final de la Copa del Rey disputado en el estadio Heliodoro Rodríguez López ante 20.176 espectadores.
