El Ford Focus, del que la marca ha vendido más de 16 millones de unidades, se renueva por completo. La cuarta generación llegará al mercado este mismo verano con muchas novedades, entre ellas una nueva plataforma, un diseño más deportivo, mejoras aerodinámicas o un espacio interior mayor.
Ofrecerá tres alternativas de carrocería –el compacto de cinco puertas, el familiar y un sedán (parece que, en principio, no llegará a España)– y cinco variantes a elegir: los acabados Trend y Titanium, el deportivo Focus ST Line, de altura rebajada y con añadidos específicos como un alerón más grande y un difusor posterior. La variante Vignale, más elegante y refinada, y el Focus Active, la opción crossover, que podrá competir con modelos como el Nissan Qashqai o el Volkswagen T-Roc.
En el apartado mecánico contará en gasolina con el 1.0 EcoBoost –con 85, 100 y 125 CV– y el nuevo 1.5 EcoBoost –con 150 y 182 CV–, que cuenta con el sistema de desactivación de uno de los cilindros, que se 'apaga' o se 'enciende' en sólo 14 milisegundos. Y en diésel ofrecerá los nuevos EcoBlue: un 1.5 en versiones de 95 y 120 CV y un 2.0 con 150 CV. En cuanto a las transmisiones, se ha mejorado la caja manual de seis marchas y estrena una automática de ocho velocidades.
También da un gran salto en el apartado tecnológico y en cuanto a equipamiento con la incorporación del sistema Ford Co-Pilot360, formado por tecnologías de protección, conducción y estacionamiento. Además, será el el primer modelo de la marca en Europa con FordPass Connect, con una red wifi que soporta hasta diez terminales.
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