
Los espejos retrovisores son uno de los principales elementos de seguridad vial activa de un vehículo, ya que a través de ellos los conductores pueden observar lo que ocurre fuera su campo de visión. Estos elementos eliminan los ángulos muertos y permiten a los conductores ver el entorno y comprobar el estado del tráfico por detrás del coche para que puedan realizar una maniobra segura, como puede ser cambiar de carril en la carretera o estacionar en paralelo. La correcta colocación y el mantenimiento de los espejos retrovisores es vital para evitar accidentes y situaciones comprometidas con el resto de vehículo que circulan por las carreteras. Esto es todo lo que debe saber sobre los espejos retrovisores.
¿Qué espejos retrovisores son obligatorios en un coche?
La Dirección General de Tráfico (DGT) señala que los vehículos destinados al transporte de personas de hasta 9 plazas deben llevar obligatoriamente el espejo retrovisor central en el interior del habitáculo y el exterior izquierdo, es decir, el del lado del conductor. En caso de que el vehículo no disponga del espejo retrovisor central, será obligatorio contar con un espejo retrovisor en el lado derecho. A pesar de ello, la mayoría de los vehículos que circulan por las carreteras tienen los tres espejos retrovisores.
Cómo ajustar los espejos retrovisores del coche
La mayoría de los conductores ajustan mal los espejos retrovisores del coche, especialmente los exteriores. Según las indicaciones de la DGT, el espejo retrovisor interior debe regularse hasta se vea toda la ventanilla trasera, mientras que el exterior izquierdo debe orientarse hasta que sea vea la calzada en su mitad inferior, pero nunca debe verse el extremo posterior de la carrocería. El objetivo es que el conductor tenga visibilidad de la mayor zona de circulación posterior. Con esta colocación, el conductor puede obtener la máxima información de un vistazo sin necesidad de girar la cabeza
¿Cuándo es necesario cambiar un espejo retrovisor?

Imagen del espejo retrovisor de recambioscoche.es
A diferencia de otros elementos, los espejos retrovisores no están sometidos a un desgaste por el mayor o menor uso del vehículo. Sin embargo, son los elementos más susceptibles de dañarse, especialmente los espejos retrovisores exteriores, debido principalmente por su ubicación en la parte exterior del coche. Conducir con los espejos retrovisores rotos es muy peligroso, ya que implica una pérdida importante de visibilidad en la carretera. Por este motivo, deben cambiarse en el momento en que presenten una rotura o avería. En ocasiones es necesario sustituir únicamente el cristal del espejo retrovisor, aunque por norma general suele cambiarse el retrovisor por completo.
Síntomas de un espejo retrovisor defectuoso
1. Está agrietado o roto. Cuando el espejo retrovisor presenta grietas significativas que deforman la visión es el momento de reemplazarlo.
2. Está manchado o no se puede limpiar. El cristal del espejo retrovisor puede mancharse por muchas razones. En ocasiones, la exposición constante al sol puede decolorar permanentemente el espejo y dificultar la visión. Cuando esto ocurre, los conductores deben cambiar el espejo retrovisor defectuoso.
3. La función de atenuación de la luz no funciona. Hoy en día, algunos vehículos modernos cuentan con espejos retrovisores que atenúan el reflejo, que hace que la experiencia de conducción sea mucho más cómoda, especialmente de noche. En el caso de que esta función deje de funcionar, los conductores deben reemplazar el espejo retrovisor.
4. Está completamente desconectado o falta. No hace falta decirlo, pero cuando el espejo retrovisor está completamente desconectado o falta, debe instalarse uno nuevo inmediatamente.
Cómo cambiar los espejos retrovisores del vehículo
Los conductores pueden diagnosticar los espejos retrovisores por ellos mismo sin habilidades o herramientas especiales. Además, cambiar el espejo retrovisor no es una tarea difícil. De hecho, cuando solo hay que sustituir el cristal no es necesario desmontar la carcasa, sino que basta con presionar el espejo para inclinarlo al máximo y extraerlo de la carcasa. Luego hay que soltar con cuidado el cristal de la sujeción con la ayuda de un destornillador e instalar el nuevo cristal del espejo. Finalmente, hay que fijar el espejo del retrovisor presionando hacia abajo en el centro del cristal.
En el caso de tener que cambiar los espejos retrovisores exteriores completos, estos son los pasos a seguir para hacerlo:
1. Retirar el revestimiento de la puerta situado en la parte interior, cerca de la esquina del cristal, con la ayuda de un destornillador.
2. Desatornillar los tornillos que mantienen sujeto el espejo retrovisor.
3. Retirar con cuidado el espejo retrovisor tirando de él.
4. Instalar y atornillar el nuevo espejo retrovisor siguiendo los pasos anteriores a la inversa.
5. No te olvides de volver a montar la tapa de plástico de la puerta en su ubicación original.
