Los Brooklyn Nets y Los Angeles Lakers estaban destinados a hacer grandes cosas la pasada temporada, especialmente viendo el potencial de sus plantillas, pero firmaron una campaña decepcionante: los neoyorquinos, séptimos en la Conferencia Este, cayeron en primera ronda de playoffs por 4-0 ante los Boston Celtics, mientras que los californianos ni siquiera se metieron en la fase final al acabar undécimos en el Oeste.
Kevin Durant, Kyrie Irving y James Harden como primeros espadas de los Nets, aunque este último fue traspasado en febrero a los Sixers de Filadelfia a cambio de Ben Simmons, pero la aventura acabó a las primeras de cambio ante los Celtics, a la postre finalistas frente a los Golden State Warriors (4-2). Peor le fueron aún las cosas a los Lakers, muy lejos de las expectativas pese a tener en su plantilla a súper estrellas como LeBron James, Anthony Davis o un decepcionante Russell Westbrook.
Durant, uno de los mejores jugadores de todos los tiempos, no ve futuro en los Nets y por eso ha pedido ser traspaso. Varias franquicias como los Phoenix Suns, Miami Heat o los New Orleans Pelicans han mantenido contactos con Brooklyn, pero ninguna de ellas ha satisfecho sus pretensiones con jugadores realmente importantes ni con un paquete comercial atractivo para llevar a cabo un intercambio entre KD y otra súper estrella.
Y ahí es donde aparecen Los Angeles Lakers. La franquicia de púrpura y oro estaría encantada de dar salida a Westbrook a cambio de Kyrie Irving para que se uniese a LeBron James y Anthony Davis. Sin embargo, en las últimas horas viene cobrando fuerza la posibilidad de que quien salga de los Lakers no sea Westbrook sino el mismísimo LeBron, a cambio de un jugador de su nivel. Y ése podría ser Kevin Durant.
Ahora mismo el trueque se antoja muy poco probable y lo que sí gana más enteros s un paquete comercial que beneficie a ambas franquicias, que quieren retomar el vuelo tras un curso 2021/22 que ha dejado bastante que desear.