LD (EFE)
Según los datos de la Balanza de Pagos difundidos por el Banco de España, esta evolución se debió, principalmente, al aumento del déficit comercial (exportaciones menos importaciones) y, en menor medida, a la reducción del superávit de la balanza de servicios (turismo) y al incremento del déficit de la balanza de rentas, en tanto que la balanza de transferencias corrientes fue la única que contrarrestó la negativa evolución del resto de componentes.
El déficit de la balanza comercial ascendió entre enero y julio a 26.637,9 millones de euros, el 36,4 por ciento más que un año antes , resultado de unas importaciones por 114.037,8 millones de euros (el 10,7 por ciento más) y unas exportaciones por 87.399,8 millones (el 4,7 por ciento más).
La balanza de servicios redujo su superávit el 11,7 por ciento, hasta 13.428 millones de euros, por el recorte del saldo positivo de la rúbrica de turismo y viajes (cayó el 5,5 por ciento, hasta 15.780,7 millones de euros) y el aumento del déficit de los otros servicios (subió el 58 por ciento, hasta 2.352,7 millones).
El déficit de la balanza de rentas se situó en 7.492,3 millones de euros, con un incremento del 6,25 por ciento, mientras que el superávit de la de transferencias se aceleró el 53,9 por ciento, hasta 1.135,4 millones de euros. La cuenta de capital tuvo en los siete primeros meses del año un saldo positivo de 4.598,4 millones de euros, el 3,65 por ciento más, pese a la ligera disminución de los ingresos por transferencias de capital de la UE, principal partida de esta rúbrica.
El déficit de la balanza comercial ascendió entre enero y julio a 26.637,9 millones de euros, el 36,4 por ciento más que un año antes , resultado de unas importaciones por 114.037,8 millones de euros (el 10,7 por ciento más) y unas exportaciones por 87.399,8 millones (el 4,7 por ciento más).
La balanza de servicios redujo su superávit el 11,7 por ciento, hasta 13.428 millones de euros, por el recorte del saldo positivo de la rúbrica de turismo y viajes (cayó el 5,5 por ciento, hasta 15.780,7 millones de euros) y el aumento del déficit de los otros servicios (subió el 58 por ciento, hasta 2.352,7 millones).
El déficit de la balanza de rentas se situó en 7.492,3 millones de euros, con un incremento del 6,25 por ciento, mientras que el superávit de la de transferencias se aceleró el 53,9 por ciento, hasta 1.135,4 millones de euros. La cuenta de capital tuvo en los siete primeros meses del año un saldo positivo de 4.598,4 millones de euros, el 3,65 por ciento más, pese a la ligera disminución de los ingresos por transferencias de capital de la UE, principal partida de esta rúbrica.