LD (EFE)
El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, ha señalado que aunque el Pacto de Estabilidad y Crecimiento establece como norma un año para corregir una situación de déficit excesivo desde el momento en que se certifica, se han tenido en cuenta dos circunstancias para ampliar el plazo.
En concreto, Almunia citó la debilidad cíclica económica y la amplitud de la corrección necesaria para que el déficit público vuelva a situarse por debajo del 3 por ciento, como motivos por los que "que creemos que 2007 es la fecha más apropiada".
Las previsiones de crecimiento publicadas por la Comisión Europea el pasado marzo apuntaban a que Italia lograría este año un crecimiento del 1,2 por ciento, pero los últimos datos manejados por las autoridades italianas señalan que será cercano a cero.
Almunia citó entre las recomendaciones aprobadas este miércoles por el Ejecutivo comunitario que Italia aplique "con rigor" el presupuesto de 2005 para evitar futuros deslizamientos y contener este año el déficit "ligeramente por encima" del 4 por ciento. Además, las autoridades italianas tiene que adoptar medidas presupuestarias que lleven el déficit público por debajo del 3 por ciento, "de forma duradera" dentro del plazo estipulado, lo que supone un reducción acumulativa en términos estructurales de, al menos, el 1,6 por ciento del PIB durante ese periodo.
El comisario consideró que si se asume un crecimiento del 1,6 por ciento en los próximos dos años y tomando las medidas adecuadas el déficit podría pasar por debajo del 4 por ciento en 2006 y regresar a niveles permitidos en 2007. La senda de ajuste del déficit debería, según la Comisión Europea, enmarcarse en "una estrategia de reforma amplia" que haga frente a los problemas estructurales profundamente enraizados, que han afectado a la economía italiana en la última década.
Italia hace frente también a un problema de deuda pública, que con un valor del 107 por ciento del PIB el año pasado es la segunda más alta de la Unión Europea después de Grecia, y esta muy alejada del valor de referencia del 60 por ciento, fijado en el Pacto de Estabilidad. Almunia indicó que la Comisión Europea considera que la deuda italiana "no se reduce lo suficientemente rápido".
En concreto, Almunia citó la debilidad cíclica económica y la amplitud de la corrección necesaria para que el déficit público vuelva a situarse por debajo del 3 por ciento, como motivos por los que "que creemos que 2007 es la fecha más apropiada".
Las previsiones de crecimiento publicadas por la Comisión Europea el pasado marzo apuntaban a que Italia lograría este año un crecimiento del 1,2 por ciento, pero los últimos datos manejados por las autoridades italianas señalan que será cercano a cero.
Almunia citó entre las recomendaciones aprobadas este miércoles por el Ejecutivo comunitario que Italia aplique "con rigor" el presupuesto de 2005 para evitar futuros deslizamientos y contener este año el déficit "ligeramente por encima" del 4 por ciento. Además, las autoridades italianas tiene que adoptar medidas presupuestarias que lleven el déficit público por debajo del 3 por ciento, "de forma duradera" dentro del plazo estipulado, lo que supone un reducción acumulativa en términos estructurales de, al menos, el 1,6 por ciento del PIB durante ese periodo.
El comisario consideró que si se asume un crecimiento del 1,6 por ciento en los próximos dos años y tomando las medidas adecuadas el déficit podría pasar por debajo del 4 por ciento en 2006 y regresar a niveles permitidos en 2007. La senda de ajuste del déficit debería, según la Comisión Europea, enmarcarse en "una estrategia de reforma amplia" que haga frente a los problemas estructurales profundamente enraizados, que han afectado a la economía italiana en la última década.
Italia hace frente también a un problema de deuda pública, que con un valor del 107 por ciento del PIB el año pasado es la segunda más alta de la Unión Europea después de Grecia, y esta muy alejada del valor de referencia del 60 por ciento, fijado en el Pacto de Estabilidad. Almunia indicó que la Comisión Europea considera que la deuda italiana "no se reduce lo suficientemente rápido".