L D (EFE) Las dos economías más poderosas de la UE incumplirán al menos por tres años consecutivos (2002-2004) la principal regla del Pacto, que fija un tope de déficit público del 3% del Producto Interior Bruto (PIB).
Aquella decisión del Ecofín, que contó con el voto en contra de España, Holanda, Austria y Finlandia, generó una reacción inmediata de la CE, que recurrió ante el Tribunal para que clarifique la validez del "procedimiento" seguido por los ministros, pero sin entrar en argumentos políticos ni económicos. El fallo del Tribunal, que ha analizado este asunto por procedimiento de urgencia (la tercera vez en su historia), deberá ser tomado por consenso de los jueces que forman la sala y será definitivo, pues no cabe interponer recurso alguno sobre la decisión.
En su reunión de noviembre de 2003, el Ecofín hizo suyas las medidas económicas y los plazos propuestos por la Comisión para que Francia y Alemania eliminaran sus déficit excesivos, pero descartó toda obligatoriedad y suspendió la perspectiva de sanciones. Los ministros se limitaron a aprobar unas "conclusiones", en vez de la "decisión" —con valor vinculante— requerida por el mecanismo sancionador del Pacto.
El Tribunal celebró el 28 de abril la vista oral sobre la demanda de la CE, en la que ésta consideró que el Ecofín no respetó el "procedimiento preciso y vinculante que debe seguir cuando es llamado a aplicar los párrafos 8 y 9 del artículo 104 del tratado".
La Comisión ha solicitado al Tribunal que anule el rechazo de sus recomendaciones por parte del Consejo, así como las conclusiones aprobadas en su reunión de noviembre. El Consejo de ministros, por su parte, argumentó que el Tratado de la Unión le concede "un amplio poder de apreciación", que le permite rechazar "recomendaciones" de la Comisión Europea en casos como éste. El Tratado "no prevé automatismo" ni establece la facultad de reaccionar como una obligación a las recomendaciones de la Comisión, argumentaron en aquella sesión los representantes del Consejo.
A la expectativa
Tanto el Ecofín como el Ejecutivo comunitario esperan la decisión del Tribunal para clarificar la situación, pues desde aquella fecha los ministros han vuelto a desautorizar a Bruselas al no seguir su recomendación de formular una alerta temprana contra Italia ante el riesgo de que su déficit público se dispare este año.
El ministro holandés de Finanzas, Gerrit Zalm, señaló el pasado lunes, al final de una reunión del Ecofín, que los ministros quieren tener "una reacción coordinada" y han pedido al Comité Económico y Financiero que "prepare diferentes respuestas a las diferentes posibles decisiones" del Tribunal.
La Comisión Europea, por su parte, también espera la decisión del Tribunal mientras elabora sus ideas para reformar la aplicación del Pacto, iniciativa que fue lanzada como respuesta a la decisión del Ecofín de noviembre.
El comisario europeo de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, señaló el pasado lunes que en este debate quiere lograr "un máximo de consenso" con los Estados miembros. Además, en una reciente entrevista, Almunia afirmó que "hay que respetar la decisión del Tribunal" y que la Comisión "reaccionará lo más rápidamente posible tras su decisión".
