L D (EFE)
En su informe de Perspectivas Económicas, la OCDE estimó que el crecimiento será del 1,9 por ciento en 2003 (frente al 2,2 por ciento augurado en noviembre), pero mantuvo el 3 por ciento para 2004. La revisión a la baja para 2003 se explica en particular por la caída de la zona euro, donde el aumento del Producto Interior Bruto (PIB) se queda en el 1 por ciento para este año (se había anunciado un 1,8 por ciento hace seis meses) y en un 2,4 por ciento en 2004 (frente al 2,7 por ciento).
El principal responsable de este hecho es Alemania, cuyo PIB no progresará más que un 0,3 por ciento este ejercicio, frente al 1,5 por ciento esperado en noviembre, aunque también sufren recortes de varias décimas porcentuales los índices de aumento para 2003 en Italia (1 por ciento), Francia (1,2 por ciento) o España (2,1 por ciento). En el caso de Estados Unidos, el ritmo de aumento para este año baja una décima al 2,5 por ciento respecto a lo anunciado en el anterior informe, pero se mantiene en el 4 por ciento para 2004.
Un recorte similar se aplica al Reino Unido, para el que la OCDE espera un crecimiento del 2,1 por ciento en 2003 y un 2,6 por ciento el año próximo. En el caso de Japón, sin embargo, la revisión es de dos décimas de punto al alza tanto este año como el próximo, situándose en un 1 por ciento y un 1,1 por ciento, respectivamente. El economista jefe de la OCDE, Jean-Philippe Cotis, consideró que el crecimiento este año será "progresivo" y "poco espectacular", aunque dijo ser "prudentemente optimista".
Cotis insistió en el hecho de que la crisis de los últimos meses ha puesto en evidencia que los países con mayores perspectivas de crecimiento a largo plazo son los que menos han sufrido el choque, y consideró que eso muestra la necesidad de llevar a cabo reformas estructurales, "sobre todo en algunos grandes países europeos", en clara alusión a Francia y Alemania.
Aludió al "espectacular deterioro" del déficit, que subirá hasta el 3,1 por ciento del PIB este año en la zona de la OCDE y señaló que la mayoría de los 30 países de la organización tienen "niveles muy importantes" de saldo negativo en sus cuentas públicas.
El principal responsable de este hecho es Alemania, cuyo PIB no progresará más que un 0,3 por ciento este ejercicio, frente al 1,5 por ciento esperado en noviembre, aunque también sufren recortes de varias décimas porcentuales los índices de aumento para 2003 en Italia (1 por ciento), Francia (1,2 por ciento) o España (2,1 por ciento). En el caso de Estados Unidos, el ritmo de aumento para este año baja una décima al 2,5 por ciento respecto a lo anunciado en el anterior informe, pero se mantiene en el 4 por ciento para 2004.
Un recorte similar se aplica al Reino Unido, para el que la OCDE espera un crecimiento del 2,1 por ciento en 2003 y un 2,6 por ciento el año próximo. En el caso de Japón, sin embargo, la revisión es de dos décimas de punto al alza tanto este año como el próximo, situándose en un 1 por ciento y un 1,1 por ciento, respectivamente. El economista jefe de la OCDE, Jean-Philippe Cotis, consideró que el crecimiento este año será "progresivo" y "poco espectacular", aunque dijo ser "prudentemente optimista".
Cotis insistió en el hecho de que la crisis de los últimos meses ha puesto en evidencia que los países con mayores perspectivas de crecimiento a largo plazo son los que menos han sufrido el choque, y consideró que eso muestra la necesidad de llevar a cabo reformas estructurales, "sobre todo en algunos grandes países europeos", en clara alusión a Francia y Alemania.
Aludió al "espectacular deterioro" del déficit, que subirá hasta el 3,1 por ciento del PIB este año en la zona de la OCDE y señaló que la mayoría de los 30 países de la organización tienen "niveles muy importantes" de saldo negativo en sus cuentas públicas.
