L D (Agencias) El vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, ha explicado este miércoles que el modelo de crecimiento actual hace que no sea conveniente bajar más los impuestos. De esta manera respondía Solbes en el pleno del Senado a la interpelación del senador de Entesa Catalana de Progrés, Ramón Aleu, sobre las repercusiones que puede tener la reforma fiscal en la economía española.
El vicepresidente señaló que la citada reforma "no es un hecho aislado", sino que se enmarca en un proyecto "para conseguir más crecimiento y mejorar el bienestar y la cohesión social", y recordó que "viene precedida de la lucha contra el fraude fiscal".
El vicepresidente señaló que la citada reforma "no es un hecho aislado", sino que se enmarca en un proyecto "para conseguir más crecimiento y mejorar el bienestar y la cohesión social", y recordó que "viene precedida de la lucha contra el fraude fiscal".
En su opinión, la reforma tiene como objetivo bajar los impuestos y recuperar un tratamiento más equitativo como lo demuestra que se iguale el tratamiento de todos los tipos de ahorro al 18 por ciento (antes era desde el 15 por ciento) y que se incentive el aseguramiento de las situaciones de dependencia.
Además, recordó que los impuestos bajarán para el 99,5 por ciento de los contribuyentes y que la rebaja media será del seis por ciento, mientras que para el 60 por ciento el ahorro será del 17 por ciento. También afirmó que "no es cierto que la reforma perjudique a las clases medias", aunque admitió que "sí puede que beneficie menos que a las clases bajas".
Además, recordó que los impuestos bajarán para el 99,5 por ciento de los contribuyentes y que la rebaja media será del seis por ciento, mientras que para el 60 por ciento el ahorro será del 17 por ciento. También afirmó que "no es cierto que la reforma perjudique a las clases medias", aunque admitió que "sí puede que beneficie menos que a las clases bajas".
Solbes informó de que el coste de la reforma del IRPF y del Impuesto de Sociedades será de alrededor de 4.000 millones de euros. Asimismo, recordó que al ser el IRPF un impuesto cedido, su reducción también afecta a las comunidades autónomas, para las que la reforma de este impuesto tendrá un coste de algo más de 500 millones de euros, aunque señaló que esta cantidad "se compensará con ingresos posteriores".
En este sentido, recalcó que "cada parlamento autonómico es responsable de su tarifa del IRPF y decidirá cuál es la que quiere aplicar". Además, incidió en la importancia de que en los planes de pensiones sólo se podrán deducir las aportaciones cuyo rescate se realice en forma de renta vitalicia y no las que se recuperen en forma de capital. El ministro de Economía y Hacienda subrayó la novedad del plan individual de ahorro sistemático que pretende incentivar el ahorro a largo plazo.