“Bartolín” será juzgado este martes por simular un secuestro en 1998

Los hechos por los que será juzgado "Bartolín" se remontan al 28 de mayo de 1998 cuando Bartolomé Rubia se presentó en la comisaría de la Policía Nacional de Irún (Guipúzcoa) denunciando haber sido secuestrado por una pareja de la que logró escaparse. Lo que en un principio fue una proeza del joven concejal derivó en una singular historia que dejó al descubierto, según las calificaciones provisionales del Ministerio Fiscal, que Bartolomé Rubia había hecho "por sí solo" la simulación de su propio secuestro.

Según la versión de Rubia fue secuestrado cuando iba a subir en su vehículo, drogado con una coca cola y trasladado en tren hasta Irún, previo transbordo en Madrid, donde finalmente consiguió zafarse de sus captores cuando viajaba en una furgoneta. Además del relato de los hechos del propio acusado, que siempre ha mantenido su versión, en la vista oral comparecerán como testigos el taxista que declaró haberlo trasladado en solitario hasta la estación de tren de Linares (Jaén), así como el funcionario de Renfe que declaró en su día haberle vendido el billete.

Bartolomé Rubia, asegura que "se demostrará" que nunca se inventó su secuestro y añadió que "mi única esperanza es que se aclare todo porque nunca me han dicho quienes eran las personas que me dieron el gran susto de mi vida". Indicó que nunca en sus declaraciones, ni ante la Policía ni ante el juez, dijo que hubiese sido un comando de ETA el que lo hubiera secuestrado, ya que siempre mantuvo que fueron tres personas las que lo captaron cuando se disponía a coger el coche.

El ya conocido como "Bartolín" anunció que su intención es la de pedir su reingreso en el PP una vez que la Justicia resuelva sobre su caso, ya que su decisión de abandonar las filas populares a finales de 1998 fue con el único objetivo de no perjudicar al partido en el que llevaba militando desde los 16 años.