(25-02-2001) Los GRAPO, dirigidos por un ex preso, cuentan con un único comando

Los tres últimos ocuparon el piso descubierto la pasada semana en la calle de Arriaga de Madrid, donde la Policía encontró documentación del Partido Comunista de España Reconstituido, PCE(r), y material para la comisión de atentados, como un coche teledirigido para perpetrar atracos a furgones.

Las mismas fuentes señalaron que un coche teledirigido similar fue utilizado en el asalto, en abril de 1993, de un furgón blindado en Zaragoza, en una acción en la que falleció un vigilante jurado, otros dos resultaron heridos, al igual que dos civiles, y tres terroristas murieron.

Tras la caída de la cúpula del GRAPO en París, el pasado 7 de noviembre, con la detención de siete miembros, entre ellos su máximo dirigente Manuel Pérez Martínez, el "camarada Arenas", la Policía sospecha que un ex preso de la banda dirige ahora la organización.

Los cuatro integrantes del único comando operativo del GRAPO fueron reclutados en casas de "okupas" de los barrios madrileños de Carabanchel y Puente de Vallecas. Las fuentes han descartado que el comando quisiera secuestrar a un empresario y, como no lo consiguió, decidió asesinar al policía de proximidad Francisco Javier Sanz Morales, fallecido el 17 de noviembre pasado en la última acción atribuida al GRAPO.

Frente a esa opinión, la Policía cree que el asesinato de Sanz Morales fue una reacción a "bote pronto" a la detención de la cúpula en París ocho días antes, y se eligió al agente porque se trataba de un objetivo fácil. Además, consideraron que el GRAPO no cuenta en la actualidad con infraestructura suficiente para poder perpetrar un secuestro y mantener retenida a la víctima.