Menú

La crisis vuelve ñoña a Rosa Montero

La prensa se divide hoy entre la reunión de soberanistas en Cataluña y las explicaciones, o algo parecido, de Rajoy.

El Mundo opta por Cataluña. “Navarro descubre ahora que Mas busca la independencia”. Pues sí que anda despistado el hombre. Sobre la reunión del PP dice que “Rajoy alega que salvó a España del rescate subiendo impuestos”. Y que, sin molestarse en disimular, tranquilizó a los barones adelantándoles que “bajarán antes de las autonómicas”. No preocuparse hombre, que seguro que pica otra vez esta pandi de bobos y nos vuelven a votar, vino a decir. Luego los volvemos a subir y listo. En su editorial , Pedro J. le dice a Rajoy que a otro perro con ese hueso, que en “España empezamos a vislumbrar que no seríamos recatados el 26 de julio de 2012 (…) meses después de la primera andanada fiscal del Gobierno popular” y fue “por la intervención de BCE”. Así que “cuidado con reescribir tan pronto la Historia”, señor presidente, que no todos nos chupamos el dedo, viene a decirle. No le perdona el “incumplimiento reiterado del programa electoral”, ni que no haya “tocado el gasto de la administración”. “Solo falta la decisión de enfrentarse a los intereses de la clase política para poder reembolsar a los españoles un dinero que servirá para consumir e invertir y, a la postre, crecer y generar empleo”, dice ya en tono suplicante.

A ABC, por el contrario, se le cae la baba con Rajoy. “Rajoy explica a Aguirre que la subida de impuestos fue inevitable para eludir el rescate”. El editorial va a poner verde de envidia al mismísimo Marhuenda. “Sin duda, Mariano Rajoy tiene razón cuando pone en valor el esfuerzo del Ejecutivo para evitar un rescate (…) Las explicaciones claras trasladan a la opinión pública una imagen de rigor”. Puf, sal a la calle y verás lo que dice la opinión pública. “Los ciudadanos sensatos son una gran mayoría y saben que la situación de emergencia económica exige sacrificios para evitar males mayores”, dice Bieito haciendo mutis por el foro de otros sacrificios. “Si no se llegan a aumentar con la máxima celeridad los ingresos con la subida de impuestos hoy estaríamos como Grecia. Esa, y no otra, era la decisión que tomó Rajoy. Y el tiempo le ha dado la razón”, concluye. Que alguien le alcance una toalla a Rajoy.

Como hay cosas difíciles de superar, La Razón es hoy hasta borde con Rajoy. “Rajoy acalla a sus barones: los ajustes evitaron el rescate. Logra el cierre de filas en el PP y Aguirre se queda sola en sus críticas sobre la subida de impuestos”, dice. Y yo que creía que este periódico estaba por bajar los impuestos, uf, qué lío. Y el editorial no lo dedica a cantar las alabanzas de Rajoy, sino al paro. Qué vergüenza Marhuenda, qué vergüenza.

La Gaceta está boquiabierta. “Ninguna voz crítica en el comité ejecutivo del PP. Disciplina”. Fernando Díaz Villanueva se rebela y le canta las cuatro verdades a Rajoy. “La desvergüenza de la rajoyía y el sorayato no conoce límites (…) Dicen que gracias a ellos el estado se ha librado del rescate (…) En diciembre de 2011 la economía española estaba ciertamente enferma. Hoy lo está mucho más”. A este ritmo de gasto, de aquí a tres años, “la deuda estatal habrá alcanzado el 150% del PIB, un punto mágico donde se quiebra o se quiebra, no hay elección”. Fernando, le has estropeado el cuento a Rajoy.

El País dice que, hay que ver, que mal pensados somos, el PSC fue a la reunión soberanista a ponerle los puntos sobre las íes a Mas. “El PSC exige a Mas que ponga fin a su deriva independentista”. Aunque en portada no le hace ni caso, en páginas interiores sí que le dedica amplio espacio a la propuesta de Rubalcaba. “Rajoy descarta el plan de Rubalcaba porque equivaldría a un rescate”. Rajoy “está dispuesto a aliarse con la izquierda francesa y la italiana para torcer el brazo a su correligionaria Merkel, pero parece negarle incluso el agua a su propia izquierda doméstica”, lloriquea. Cebrián ruega a Rajoy que no sea así, hombre, que “las propuestas tienen una desigual aplicación práctica” –o sea, ninguna- pero “con todo, es de rigor tomar el conjunto de la iniciativa en consideración como punto de partida para articular ese necesario consenso que sirva para enfrentase a la dramática situación por la que atraviesa un número creciente de españoles”.

Y mientras estas cosas terribles suceden en el mundo, Rosa Montero tiene un problemón de cuidado. “Otra de las consecuencias negativas de la crisis es la comedura de coco que produce. O sea, no solo nos empobrece económicamente sino también mentalmente”. Eso, échale la culpa a la crisis. Y es que resulta que hoy no sabe de qué hablar. Menudo marrón. Así que echa mano de la literatura y se acuerda de un consejo de Hemingway. “Escribe la cosa más verdadera que conozcas”. Ni corta ni perezosa, Rosa se pone al lío. “¿Qué es lo más verdadero que conozco?”. Les resumo que es un poco largo. “Es verdadera mi edad”, “los errores cometidos” y “el orgullo y la gratitud de saber que hay personas que me quieren y a las que quiero”, entre otras cosas. Ya, Rosa, pero es que eso no le importa a nadie. “Es verdad que el mayor placer es la belleza, un paisaje hermoso, una música, un libro”, etc, etc, etc, continúa ya lanzada. “Y es cierto, en fin, que soy capaz de escribir esta ñoñería sin avergonzarme”. Y que te paguen por ello, que no es poco.

Temas

En España

    0
    comentarios