Aunque plenamente previsible, la designación de Miguel Arias Cañete como cabeza de lista del PP fue acogida en las filas populares en el Parlamento Europeo con "enorme satisfacción" y sin ahorrar adjetivos para el que, en palabras de Luis De Grandes, número dos y portavoz oficioso desde que Jaime Mayor Oreja decidió dar un paso atrás y autodescartarse como candidato, es "un político con mayúsculas (…) con prestigio notorio en Europa".
Los socialistas, en cambio, conscientes del prestigio de su rival en los círculos de poder en Bruselas, aseguran que les daba "exactamente igual" quién encabezara la lista. "Hombre o mujer, a quien hay que batir es al PP", al que el número uno de los socialistas culpó de la mala gestión de la crisis económica de los últimos años.
Cañete comisario
Aunque oficialmente concurre a las elecciones como número uno de los populares, se da por hecho que su paso por el Parlamento será un mero trampolín para uno de los altos despachos de la Comisión Europea que España defiende se ha ganado tras varios años infrarrepresentada en las instituciones internacionales. Sus compañeros de filas y futuros colegas le visten ya con el traje de comisario y dan por hecho que ocupará una cartera de relumbrón. "Es un candidato serio que ocupará la plaza de comisario de España y tendrá una buena cartera", declaraba el secretario general del PPE, Antonio López Istúriz, a Déjate de Historias, de esRadio.
Además de su perfil técnico, la eurodiputada del PP Carmen Fraga, tras haber trabajado con el hasta ahora ministro, destacó a este diario su "capacidad de trabajo" y el hecho de que "conoce muy bien el Parlamento y las demás instituciones".
"¡Estoy deseando verlo debatir con Valenciano!", exclamaba, divertido, otro eurodiputado que, en vísperas de recibir (o no) la llamada de Génova prefiere pasar inadvertido y no hacer declaraciones. "Es muy capaz de hablar llanamente y batirse con Valenciano hablando su idioma y calando en la gente de a pie", destacaba, no obstante, de forma informal. Y es que, en el seno de la delegación española del PPE, es compartida la opinión de que el perfil técnico de Arias Cañete, al que retratan como "un abogado del Estado con importante nivel de formación y capacidades", no le resta capacidad de fajarse en una campaña electoral. "Es un hombre de campo"; remachaba De Grandes.
A toro pasado, los mismo que se lamentaban de los tiempos del presidente del Gobierno, celebran ahora que Mariano Rajoy apurara los plazos disponibles. "Ha sido una gran estrategia", aplaudían varios eurodiputados mientras veían juntos la rueda de prensa de la secretaria general de su partido. Oficialmente, la razón que aducen es que "Cañete no necesitaba la precampaña", en contraste con la socialista Elena Valenciano, a la que Luis de Grandes le atribuyó "un bajo nivel de notoriedad".
En todo caso, el paso de Cañete por la Eurocámara podría, a pesar de su esperada brevedad, ser más importante y tener un mayor calado de lo que parece. "Tendrá tiempo de organizar la nueva delegación, con su buen criterio", vaticina Fraga. "Es capaz de eso y mucho más", apunta. Y es que, en los pasillos del Parlamento Europeo, es frecuente escuchar quejas de quienes creen que el equipo popular no ha sido capitaneado con el fuelle que requiere una institución que decide sobre tantos y tan diversos temas que afectan al ciudadano todos los días. En ese sentido, en la última reunión de delegación, varios diputados pidieron que, pese a la brevedad de la campaña, "se informe bien al ciudadano de lo que se juega en Bruselas".
El de Cañete es, en resumen, un perfil que, a juzgar de sus compañeros y rivales, podría encajar fácilmente en muchos puestos de importancia en el ajedrez institucional en el que, de aquí a los próximos meses, España tratará de obtener un mayor poder.