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Presos con móvil, la última moda de la era Sánchez: los funcionarios claman por la falta de inhibidores en la cárceles

Los funcionarios alertan de la peligrosidad que supone que los inhibidores de las prisiones hayan dejado de funcionar.

Los funcionarios alertan de la peligrosidad que supone que los inhibidores de las prisiones hayan dejado de funcionar.
Acceso a la cárcel de Valdemoro. | Kelu Robles

Nuevo escándalo en las cárceles españolas. Los funcionarios de prisiones han puesto el grito en el cielo por la extensión sin control de un peligroso y ya generalizado fenómeno: los presos con móvil. "El Ministerio de Interior debe explicar la causa de que no funcionen los inhibidores en las prisiones españolas". Esta es la queja que ha planteado uno de los principales sindicatos de los funcionarios de prisiones ante la situación. Y es que ver a presos hablando por móvil, o confirmar, por sus contactos o mercancías introducidas en las prisiones, que han conseguido mantener conversaciones libremente con el exterior ya no es extraño en las cárceles españolas.

José Ramón López, presidente de ACAIP-UGT sindicato mayoritario en prisiones, ha puesto la mirada directamente en el ministerio de Interior, Fernando Grande-Marlaska, al que ha exigido explicaciones de los motivos por los que "no funcionan los inhibidores de frecuencia de móviles en las prisiones españolas".

Prisión de Botafuegos

ACAIP-UGT pone como ejemplo la difícil situación que se vive en la prisión de Botafuegos, en la que, durante los últimos meses, "se han producido una serie de hechos muy preocupantes como coacciones y amenazas a los trabajadores, y el aumento de los casos y episodios de conflictividad con los internos".

Los datos de 2022, tomados a 30 de septiembre son representativos: reflejan un total de once agresiones a trabajadores del centro penitenciario, lo que significa haber multiplicado por tres las producidas otros años, "a pesar de haberse reducido la población reclusa", destacan desde el sindicato.

Además, "la gravedad de las mismas ha aumentado, generando preocupación entre los trabajadores", añaden desde ACAIP-UGT.

También ha habido un aumento de las incautaciones de móviles e, incluso, de la detección de drones sobrevolando las cárceles. "Esto último es de especial gravedad por los problemas de seguridad que puede generar, por la facilidad con la que podrían introducirse objetos muy peligrosos en las prisiones españolas, como armas o explosivos", subrayan desde el sindicato.

Sin inhibidores de móviles o drones

José Ramón López destaca con especial insistencia "la necesidad de tomar medidas que eviten la facilidades de uso de móviles o el vuelo de drones, instalando inhibidores adecuados, un problema que afecta a todas las prisiones, pero que en Algeciras se ha visto incrementado por las organizaciones vinculadas al tráfico de drogas".

El sindicato reclama, por otra parte, que se realice una política de dispersión de los internos relacionados con el narcotráfico, "que presumiblemente están detrás de todos estos incidentes", debido a los medios con los que cuentan sus organizaciones.

López señala, a su vez, que no es normal que a pesar de la quema de coches de compañeros, de los plantes de internos, de las agresiones a funcionarios, o de la continua aprehensión de móviles, "no se produzcan traslados y los presuntos implicados en estas acciones permanezcan en el centro".

Desde ACAIP-UGT subrayan que ya se ha instado a que se tomen medidas urgentes. "Esperemos que se adopten antes de que tengamos que lamentar una desgracia irreparable", añaden.

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