El ataque terrorista de Hamás contra población civil en el sur de Israel el pasado 7 de octubre y la reacción del Ejército de Israel haciendo uso de su legítimo derecho a la defensa han influido en el escenario de la seguridad no sólo en Oriente Medio, sino también en Europa. Muestra de ello son los atentados islamistas en días posteriores que tuvieron lugar tanto en Arrás (Francia) como en Bruselas (Bélgica).
Los países europeos reunieron a sus analistas de inteligencia y seguridad para decidir cómo se afrontaba la situación. Algunos países han aumentado sus niveles de alerta, como es el caso de Suecia (ha pasado del nivel 3 al nivel 4 de los 5 niveles de su baremo), o como Francia, Bélgica o Italia, que han subido su nivel hasta el nivel 5 de 5, sacando el Ejército en algunos casos o algunas fronteras específicas.
Otros países, tras no detectar un riesgo de amenaza terrorista inminente, no han variado sus niveles de seguridad. Se trata del caso de países como Alemania, Austria, República Checa, Reino Unido o Países Bajos. Estos cinco países se mantienen en el nivel 4 de alerta terrorista sobre un baremo de 5. Otros países europeos, con ínfima inmigración musulmana, sobre todo en Europa del Este, se han mantenido en nivel 2 de alerta.
En España, en el Ministerio del Interior, se reunió la pasada semana la Mesa de Valoración de la Amenaza Terrorista, en la que participan Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO), del Centro Nacional Inteligencia (CNI), de la Policía Nacional, la Guardia Civil, los Mossos d'Esquadra, la Ertzaintza, el Departamento de Seguridad Nacional (DSN) de Presidencia del Gobierno y del Centro de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (CIFAS).
La decisión que se tomó en el departamento que dirige Fernando Grande Marlaska a pasada semana fue la de mantener el nivel 4 de alerta terrorista que ya existía en España, pero reforzado. Se optó por "implementar una serie de medidas complementarias". Entre esas medidas, está el "refuerzo de los dispositivos de seguridad sobre determinados puntos especialmente sensibles de todo el territorio nacional".
Qué son el nivel 4 y nivel 5 de alerta terrorista
El Nivel de Alerta Antiterrorista en España es una escala compuesta por varios niveles que se van complementando, cinco en total, como en la gran mayoría de los países europeos, cada uno de los cuales se encuentra asociado a un grado de riesgo, en función de la valoración de la amenaza terrorista que se aprecie en cada momento por parte de los expertos de los organismos mencionados anteriormente.
Los cincos niveles de riesgo existentes son los siguientes: el Nivel 1 corresponde a riesgo bajo, el Nivel 2 a riesgo moderado, el Nivel 3 a riesgo medio, el Nivel 4 a riesgo alto y el Nivel 5 a riesgo muy alto o atentado terrorista inminente.
Las medidas de prevención están principalmente dirigidas en el plano tecnológico a proteger los sistemas y redes que permiten el funcionamiento de los servicios esenciales. En el plano físico, a la protección de infraestructuras críticas, es decir, esenciales para el funcionamiento normal de un país, como pueden ser puertos, aeropuertos, lugares comerciales, nudos de comunicaciones, fuentes de energía, distribución de agua…
El nivel 4 o riesgo alto de atentado supone el incremento sustancial de la presencia de las Fuerzas de Seguridad en nudos de comunicaciones y lugares donde hay gran afluencia de público. A lo que se añade el aumento en otras infraestructuras críticas que ya trae consigo la activación del nivel 3 de alerta. Supone un aumento significativo de agentes por lo que distorsiona los cuadrantes normales de trabajo y las libranzas y vacaciones de los agentes.
El nivel 5 o riesgo inminente de atentado supone un esfuerzo extraordinario, ya que no sólo saca a buena parte de los efectivos de las Fuerzas de Seguridad del Estado a las calles de las ciudades y a dar seguridad a las infraestructuras críticas, sino que también supone la movilización de miles de efectivos de las Fuerzas Armadas.
España nunca ha estado en nivel 5 de alerta terrorista, ni tan siquiera tras los atentados terroristas de Cataluña en 2017. Entonces, el Gobierno de Mariano Rajoy decidió mantener un nivel 4 reforzado, similar al actual. Los países europeos que aumentan su nivel de alerta al 5 no suelen mantenerlo durante muchas semanas o meses, debido al fuerte estrés que supone para la infraestructura de seguridad del país.
España lleva en el nivel 4 de alerta terrorista desde finales de junio de 2015, después de los atentados yihadistas que se produjeron de manera simultánea en Francia, Túnez y Kuwait. Desde entonces se ha movido entre el nivel 4 y un nivel 4 reforzado.