Tras la solemne jura de la Constitución Española de la princesa Leonor y la entrega del collar de Carlos III, la Familia Real ha celebrado un almuerzo en el comedor de Gala del Palacio Real con más de cien invitados. Antes de su comienzo, el Rey ha tomado la palabra para hacer un breve discurso dirigido a la princesa de Asturias centrado en los deberes que asume y recordando el día en que él también juró la Constitución.
Felipe VI ha enfatizado el compromiso que asume hoy "quien encarna la continuidad de nuestra monarquía con nuestros principios democráticos y valores constitucionales" y ha recordado lo que en su día le dijo a él el entonces presidente del Congreso, Gregorio Peces Barba. El juramento simboliza, ha señalado, el "sometimiento al Derecho", al sistema parlamentario representativo, el compromiso de servicio y la lealtad al Rey y a la Corona.
Esas palabras "han sido una guía para el ejercicio de mis funciones", ha señalado el Rey, que ha destacado cómo "el sometimiento al Derecho constituye una exigencia para la Corona y para todas las instituciones" y cómo la observancia de la ley y la separación de poderes "son los pilares esenciales de toda democracia representativa" y la "garantía de las libertades y los derechos".
Felipe VI ha destacado además cómo aceptar el sistema parlamentario supone reconocer la soberanía nacional del pueblo español y cómo la lealtad al Rey supone también la lealtad a lo que la Corona simboliza, "la unidad y la permanencia de España". En estas palabras, ha dicho el monarca, Leonor "encontrará las razones de su responsabilidad. Su deber, como también el mío, es cumplir y respetar la Constitución y prevalece sobre cualquier otra consideración". El Rey ha enfatizado sobre la Carta Magna cómo "trajo a España la libertad y la democracia" y citando a Miguel Herrero y a Miquel Roca, presentes en el banquete, ha señalado cómo supone una "unión de voluntades" que "nos recuerda los principios fundacionales de nuestra democracia, esa gran obra colectiva donde se asienta la convivencia".
"Leonor, no estarás sola en el camino", ha señalado dirigiéndose a su hija y mencionando cómo en su familia encontrará "el apoyo más personal" y cómo "el conjunto de los españoles sabrá reconocer tu entrega con su aliento y afecto". Su obligación, ha señalado hablando a esta nueva generación, "es legaros lo mejor de la España que hemos recibido". "La democracia y la libertad no se construyen de un día para otro y precisan de un cuidado continuo", ha advertido.
El Rey ha finalizado con su enhorabuena y un feliz cumpleaños, y ha invitado a todos a brindar por ella: "Larga vida y acierto a la princesa de Asturias".