Sigue el goteo de viejas glorias del proceso separatista que salen en apoyo del candidato socialista, Salvador Illa. Si en el debate de TV3 el dirigente socialista catalán anunciaba el fichaje del exjefe de los Mossos Josep Lluís Trapero (a quien nombrará director general de los Mossos, un cargo político, si alcanza la presidencia), horas después trascendía que el exconsejero de Puigdemont Santi Vila (que dimitió horas antes de la proclamación de independencia en el parlamento regional) y Miquel Sàmper, consejero de Interior de Quim Torra, han firmado un manifiesto a favor de Salvador Illa en el que se preconiza la apertura de una "nueva etapa" política en Cataluña.
Vila fue tachado de "traidor" e insultado y despreciado de las más variadas formas por oponerse tímidamente a la deriva golpista de Puigdemont y abandonar el gobierno catalán horas antes de la declaración de independencia votada en el Parlamento por los diputados separatistas. A diferencia de la mayoría de sus compañeros de gabinete golpista, fue condenado a un año y ocho meses de inhabilitación especial y sólo pasó 24 horas en prisión tras depositar una fianza de 50.000 euros de la que no se quiso hacer cargo ni su partido, el PDeCAT, ni la "caja de solidaridad" separatista.
El caso de Sàmper es aún más singular, pues en su actividad política y en su participación en los medios (es tertuliano en la emisora del grupo Godó) siempre se ha manifestado a favor de romper con España. De momento no ha dado explicaciones sobre su cambio de chaqueta. Dejó Junts per Catalunya (JxCat), el partido de Puigdemont, el pasado febrero en desacuerdo con la decisión del prófugo de tumbar la primera versión de la ley de amnistía.
Illa ha llegado a reivindicar durante su campaña el "legado" de Jordi Pujol y ha difundido una fotografía en la que aparece conversando el pasado 7 de mayo con Miquel Roca. "Hemos intercambiado impresiones sobre el momento político que vive Cataluña. Un placer, como siempre", escribía Illa en el texto adjunto a la imagen.