
La actividad del narcotráfico en el área del Estrecho de Gibraltar, principalmente en la provincia de Cádiz, no se frena. Como tampoco lo hacen los intentos de la Guardia Civil por evitar su actividad ilícita, pese a que no cuentan con los medios necesarios para combatir esta lacra. La consecuencia directa es que estos grupos ilícitos llevan años envalentonados, empleando sin reparo la violencia contra las Fuerzas de Seguridad cuando se enfrentan a ellos.
En las últimas semanas ha llamado la atención que algunos de los grupos de narcos están empezando a emplear armas largas para dar seguridad a sus descargas de drogas. Otro paso adelante en el descontrol de la zona. Es por ello que la principal asociación de la Guardia Civil, Justicia Civil (JUCIL), ha pedido a la Dirección General del Instituto Armado que comience a dotar también de armas largas a los agentes que están destinados en las demarcaciones más calientes en la lucha contra el narcotráfico.
"El nivel de peligrosidad y violencia de los narcotraficantes ha escalado y en los alijos se encuentran ya de forma habitual armas de guerra. Ante esta situación, JUCIL reclama que los agentes puedan emplear este tipo de armas, almacenadas en los armeros oficiales de las compañías", han explicado la asociación de guardias civiles, que pide que el reparto de este tipo de armamento se haga a todas las patrullas de seguridad ciudadana que operan en la zona costera de Huelva y Cádiz.
Además, ha pedido que "se implementen mecanismos que permitan la rápida movilización de un equipo de apoyo en caso de producirse situaciones de riesgo, garantizando la presencia de al menos una patrulla debidamente equipada con todos los medios necesarios, incluyendo armas largas y vehículos todo terreno, en cada uno de los núcleos operativos con mayor incidencia", a las que habría que equipar con todos los materiales tecnológicos y de seguridad disponibles para la lucha contra este tipo de criminalidad.
La asociación recuerda que entre las medidas que solicita para potenciar la lucha contra los narcos se incluye la renovación de la flota marítima con embarcaciones a la altura de la que usan los traficantes, mayores medios terrestres y personales, la creación de un juzgados especializado en narcotráfico en Cádiz, la declaración de zona de especial singularidad (ZES) del litoral andaluz, la tipificación del petaqueo como delito y el regreso del antiguo Ocon-Sur.

