En La Alcaidesa, Cádiz, a escasos metros del mar, se alza una villa de lujo de tres plantas, 300 m² construidos y 750 m² de parcela. Piscina, seis dormitorios, terrazas con vistas panorámicas, aparcamiento para cuatro coches y hasta sala de máquinas en el sótano. Un chalé de ensueño en una de las zonas más exclusivas de Cádiz. Este fue el regalo inmobiliario que, según investiga la UCO, recibió José Luis Ábalos, el que fuera la mano derecha de Pedro Sánchez a través de la trama de los hidrocarburos.
Esta villa de lujo, que se entrega totalmente amueblada, se encuentra muy cerca de la playa y tiene un valor de 770.000 euros. Esta es la radiografía completa del chalé que disfrutó Ábalos: en la planta principal cuenta con un gran recibidor, amplio salón con aire acondicionado y acceso directo a una terraza con jardín, gran cocina con comedor, despensa, cuarto de lavandería y un patio interior con acceso lateral al jardín. Además cuenta con tres dormitorios luminosos y un baño que completan esa planta. En la segunda planta hay otros tres dormitorios: el principal con baño en suite, vestidor y una gran terraza con vistas al mar, Gibraltar y África. Los otros dos dormitorios también miran al mar y comparten un amplio baño. En el sótano se encuentra la sala de máquinas con depósito de agua, calentador de 300 litros, gas y el motor de calefacción. Todo ello rodeado de un jardín con piscina y zona de aparcamiento trasero para cuatro coches.
Ábalos racaneó hasta la luz
Pero para el exministro no era suficiente que fuese gratis la villa de lujo. Y es que, el socialista no estaba dispuesto a pagar la luz del chalé. El racaneo de Ábalos no tiene fin, quería que todo estuviese incluido: llegó al chalé y, al encontrar el contador dado de baja, se negó a pagar la luz. Así lo recoge el sumario del caso que describe el nivel de impunidad y descaro del hombre de confianza de Sánchez.
La vivienda, a nombre de la sociedad Have Got Time SL, no era un simple favor: era una moneda de cambio. Así lo sospecha la UCO, que recoge conversaciones entre Ábalos, su mano derecha Koldo García y el empresario Víctor de Aldama que evidencian que el exministro sabía perfectamente que aquel chalé era parte de una contraprestación encubierta. ¿A cambio de qué? Según la investigación, de facilitar licencias para que empresas como Villafuel -implicada en el fraude de 182 millones de euros- pudieran operar sin ningún tipo de problema.
El electricista y los 200 euros
El 26 de noviembre de 2021, Ábalos avisaba a Koldo: no había luz en la vivienda. A partir de ahí, se desata una cadena de mensajes: llamadas a Aldama, fotos del contador con la inscripción "Contrato en baja", la aparición de un electricista, e incluso la mediación de Carmen Pano, madre de la socia de la empresa que adquirió el inmueble. La conclusión: se conectó la luz por 200 euros… que, por supuesto, tampoco pagó Ábalos. En un momento de la conversación, el exministro deja clara su postura: "Pero si no pagan…", en referencia a los que le habían regalado la villa. Y es que Ábalos no estaba dispuesto a pagar ni un solo euro.
Este nuevo bochorno de Ábalos confirma el modus operandi de la trama del PSOE que ahora está bajo la lupa judicial: juego de favores, regalos y una actitud lejana a la legalidad. Y es que, todo esto ocurría mientras se tramitaban licencias a Villafuel desde el ministerio de Teresa Ribera. El contador del chalé no funcionaba, pero el de la trama del PSOE, iba a pleno rendimiento.