
La cascada de escándalos que rodean a Pedro Sánchez, como la imputación de dos exsecretarios de Organización imputados (uno de ellos en prisión) además de su mujer y su hermano no han hecho que pierda el apoyo de los habituales abajofirmantes de la izquierda. Un manifiesto lanzado este lunes con nombres como Pedro Almodóvar, Ana Belén, Miguel Ríos, Joan Manuel Serrat o Carlos Bardem, sumados a ex ministros socialistas como Juan Fernando López Aguilar, Magdalena Álvarez y José Montilla, proclama que el "ataque, desde todos los frentes conservadores y reaccionarios" que está recibiendo el presidente "se asemeja más a una conspiración para derribar a un gobierno legítimo que a la crítica política propia en un sistema democrático".
Al rescate del presidente, más en el alambre que nunca entre sus socios y asediado por las causas judiciales, los firmantes afirman que "las incriminaciones y calumnias han alcanzado niveles desconocidos en los parlamentos europeos" y llegan a decir que "los ataques a las personas migrantes y la vandalización de las sedes de partidos de izquierda recuerda las agresiones fascistas de épocas pasadas".
"La ofensiva y derribo del Gobierno no se han quedado en meras palabras, sino en la activación y movilización de todos los sectores de poder, institucional o no, que existen en el ámbito conservador", continúa el manifiesto, que asegura que el Senado (controlado por el PP) "se utiliza como ariete contraponiéndolo por sistema al Congreso", citando las comisiones de investigación. También cargan contra los jueces que han protestado contra las reformas que planea el Ejecutivo y que según la mayoría de magistrados harían peligrar la independencia judicial: afirman que "sectores del poder judicial organizan concentraciones y huelgas, fuera de la legalidad, contra leyes del Congreso que no les gustan -la amnistía, la reforma de la justicia- cuando esta última no ha sido aún aprobada".
También se quejan de que se investigue judicialmente al entorno del presidente: "Jueces y magistrados abren prolongadas investigaciones, con endebles bases probatorias, mientras la oposición deslegitima al Tribunal Constitucional porque no comparte la sentencia sobre la amnistía".
Además, en plena sintonía con Pedro Sánchez, arremeten contra los medios que osan criticar al PSOE: afirman que "una parte muy importante de los medios de comunicación y redes sociales han desatado una orgía de falsas noticias o medias verdades con el fin de crear un clima político irrespirable" que, dicen "no se compadece con situación del país".
Tienen palabras para "un sector de la jerarquía de la Iglesia", al que acusan de violar "la neutralidad política" por la petición del presidente de la Conferencia Episcopal, hace unos días, de dar "la voz a los ciudadanos" en "apoyo claro de las posiciones de derechas".
"Golpe" contra Sánchez
En el manifiesto, se quejan de que "se oculta por sistema o se informa sesgadamente sobre los avances del Gobierno de coalición en materia económica y social" y aprovechan para loar los logros económicos del "Gobierno de coalición progresista". Al mismo tiempo, defienden la amnistía alegando que se está tergiversando "el hecho esencial de la estabilidad política de Cataluña, como consecuencia de medidas de gracia constitucionales plenamente justificadas".
Concluyen invocando la Constitución para aclarar que Sánchez "tiene legitimación constitucional para seguir gobernando" otros dos años. "La caída del Gobierno sólo es posible por el éxito de una moción de censura o la celebración de elecciones, si las convoca el presidente del Ejecutivo". "Ninguna de las dos opciones se ha dado hasta el momento. Pretender acortar la legislatura por otros métodos supondría un golpe inconstitucional", afirman, diciendo que "aquellos que solicitan que se celebren ya elecciones, sean de derechas o de izquierdas, lo único que desean es que llegue un gobierno de las derechas PP/Vox".
Sin dimisión si no hay juicio y condena
"Es inadmisible que un Gobierno, democráticamente elegido, caiga por un informe de la Guardia Civil antes de celebrarse un juicio con todas las garantías en el que se acreditase la responsabilidad de la presidencia o del partido afectado", aseguran tras calificar de "graves" los "supuestos delitos" de Cerdán y Ábalos. Por todo ello, recalcan su apoyo a la "continuidad de la legislatura".
