Menú

España deja de vender material antidisturbios a Perú, asediado por la izquierda golpista

El ministro del Interior de Perú confirma que el gobierno de Sánchez "ha decidido no vender gas lacrimógeno a la policía".

El ministro del Interior de Perú confirma que el gobierno de Sánchez "ha decidido no vender gas lacrimógeno a la policía".
Los manifestantes se enfrentan a la Policía en Lima. | Cordon Press

España ha suspendido las exportaciones de material antidusturbios a Perú, un país que vive bajo el asedio de la izquierda radical que ha tomado las calles al asalto en una ola de protestas violentas en las que ya han muerto al menos 70 personas.

"Efectivamente, sí, España ha decidido no vender material (gas) lacrimógeno a la Policía Nacional, respetable por cierto", dijo el ministro del Interior de Perú, Vicente Romero, en una rueda de prensa recogida por RPP Noticias. El ministro también confirmó que llamarán "a otras puertas" para comprar este material.

El ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, confirmó el pasado martes durante su comparecencia en el Congreso, el fin de las exportaciones del material que permitiría al gobierno peruano mantener a raya a los radicales y proteger el "estado de derecho" que "vive en democracia". Albares decidió, de este modo, plegarse a los deseos de sus socios de investidura y a Amnistía Internacional, que hace días pidió al gobierno español la suspensión de la venta de este material a Perú.

Los disturbios de la extrema izquierda, alentada por gobiernos extranjeros comunistas como Bolivia, comenzaron tras el fallido intento de golpe de Estado perpetrado por el expresidente Pedro Castillo. Tras ello, Dina Boluarte asumió el poder a la espera de que el Congreso apruebe la convocatoria de unas nuevas elecciones. Pero los extremistas, muchos de ellos con preparación paramilitar, se lanzaron al terrorismo y la subversión cortando las principales vías de comunicación para asfixiar las ciudades.

En los enfrentamientos entre los policías, escasamente pertrechados, y los extremistas violentos y armados incluso con bombas caseras, ya han fallecido al menos 70 personas. El pasado 10 de enero, la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, abrió una investigación preliminar contra la presidenta Dina Boluarte, el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola, y el ministro de Defensa, Jorge Chávez, por los presuntos delitos de "genocidio, homicidio calificado y lesiones graves".

Y mientras Perú busca el modo de volver a la normalidad y controlar los actos terroristas que buscan desestabilizar a la nación, el ministro de Exteriores Albares les deja sin material antidisturbios para manejar lo que él ha calificado como "conflicto civil": "En el momento en que empezó esta situación de ruptura, digamos, de conflicto civil, paramos cualquier exportación de material militar y policial a Perú como hacemos siempre", afirmó en la Comisión de Exteriores del Congreso de España.

Temas

En España

    0
    comentarios

    Servicios

    • Radarbot
    • Curso
    • Inversión
    • Securitas
    • Buena Vida
    • Reloj Durcal