Santiago Abascal ha lanzado una clara advertencia al PP en plenas negociaciones en Extremadura para intentar llegar a un acuerdo que resuelva el desaguisado provocado por ambos al dejar en manos del PSOE la Asamblea y permitir una investidura fallida del socialista Guillermo Fernández Vara en el arranque de campaña.
"El pacto de Baleares no servirá de ninguna manera para Extremadura, Murcia o Aragón", ha dicho el líder de Vox en declaraciones a los medios desde Salamanca señalando que la diferencia es que en las Islas había riesgo de que gobernaran partidos separatistas y, además, la popular "Marga Prohens ha respetado en todo momento a los electores de Vox y no les ha insultado como ha ocurrido en Extremadura", en clara alusión a María Guardiola que arremetió duramente contra su potencial socio de gobierno.
Abascal ha reprochado también Fernando López Miras en Murcia haber incumplido el acuerdo de investidura pactado con Vox, pactado además con "tránsfugas" de su partido en la pasada legislatura. Una decisión que ha calificado de "gigantesco error" y por la que ahora no está dispuesto a ceder los dos diputados que le faltan al popular para la mayoría absoluta. Los de Abascal han hecho también hincapié, en varias ocasiones, en el 18% de apoyos que han cosechado en esta región y que, según defienden, les legitiman para pedir entrada en gobierno.
Las posturas enrocadas de PP y Vox en esta comunidad provocaron también que el PSOE acabara logrando asientos en la Mesa de la Asamblea en lugar del partido de Abascal, que se quedó fuera de este órgano. En este caso, al menos, la presidencia sí la ostentan los populares, a diferencia de lo sucedido en Extremadura, donde la presidencia de la Mesa por parte del PSOE aboca a una legislatura muy complicada para la derecha, si finalmente consiguieran llegar a un acuerdo de gobierno.

